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104 Vida del Beato il por otro a ir a pecar á la caía de unas mux * geres publicas , fe refiltio valerolamente, temerofo de que el Santo Bernardo le ve. rió, aunque eltaviera muy lejos; pero ta- les fueron lás inftancias , que al Én fe rin dió , y fue ala caía, aunque con mucho miedo. Mientras eltavan los dos efperan< do en la cama para cumplir fa mal inten= to , fe les apareció un Capuchino , que cubriendolos con fu propio manto , fe fue fin mirarlos. El mozo todo affuftado , y turbado le dixo á fu pervertidor : No té dixe yo-, que Fr. Bernardo lo veria to- do. Y confirmando el compañero la vi= fion , fe falieron de aquella infame caía arrepentidos , y enmendados. Diofes , decia el Profera Ifaias , llas maria 4 aquellos , que anunciarian las cos fas venideras , y al ver efta gracia en nucítro Santo las gentes le tenian por mas que hombre : Eltava enfermo un mozo noble , pero de malas coltumbres , vilitós le el Santo Varon , y aunque los Medis «os le avian ya delauciado , el le pronoftts-, 7 co Y