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cruentamente·. a Jesucristo como víctima, sien– do el mismo Jesucristo principal oferente y sacerdote. Banqu~e en que la carne de Cristo es ·éo– mida y su sangre es bebida. Los. ·fieles deben comulgar en la santa Misa. • •• ..Unión con Cristo y por Cristo con el Padre. «I.,p$ que nos sentamos a la Mesa de Dios so,. mos del número de •1os hijos de Dios.» . ·oblación de toda_ la Iglesia: que ofrece a Dios el más precioS'o de todos los dones de El recibidos : a Jesucristo, y con El. a todos sus mieml:>ros lo.s cristianos. Al ofrecer el santoJ3acrifiei0;- unidos al sacer– dote, ofrezcamos · a Diós, con .. el sacrificio de su Hijo, nuestro propio sacrificio-; la · oblación de tqda nuestra vida. 2.: MISA DIALOGADA Ofrecimiento ¡ Dios de misericordia y de toda consolación, que nos habéis amado hasta el punto de en– tregar a :vuestro Hijo Unigénito, por nuestro amor, a la más acerba de las muertes, y que queréis que el sacrificio de su Cuerpo y -de su Sangre sea renovado incruentamente todos los días en nuestros altares! Concededme la gracia de asistir a es_tE'. santo Sacrificio con·' fe, amor y reverencia. : . -, ' • ;· ,,, • En unión de toda" vuestra santa •Iglésia;, y '70

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