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Además por el sinnúmero de indulgencias que se pueden lucrar con el rezo del santo Rosario. Modo de rezarlo.-Sobre lo dicho hay que añadir para la práctica: 1. 0 , que se pueden rezar las decenas en veces, en tiempos sepa– rados: esto han de tenerlo presente las per– sonas muy ocupadas y las enfermas; 2. 0 , que la Letanía es devoción añaciida al Rosario, pero no parte esencial de éste : yerran, pues, los que dejan el Rosario porque no saben la Letanía. • Es común y popular el siguiente modo de rezarlo: «Por la señal.. .--Señor mío, Jesucristo». V. Domine, labia mea aperies.-R. Et os meum annuntiabit laudem tuam.-V. Deus, in adiutorium meum intende.-R. Dominne, ad adiuvandum me festina.--Gloria Patri... En cada misterio: «¡.María, madre de gracia, de piedad y de misericordia : defiéndenos de nuestros enemi– gos y ampáranos ahora y en la hora de nues– tra muerte! - Amén.» Misterios... (se anuncia los que se van a meditar: gozosos, etc.); y a continuación: Primer misterio... (el que sea) ...-Padrenues– tro, diez Avemarías y Gloria Patri. 44