BCCCAP00000000000000000001798

sus monumentos artísticos, reliquias de las más gloriosas civilizaciones. Y me es amable para mí por la misma razón porque lo es para e1 Sagrado Corazón de Je– sús: por ser cristiana, apostólica y romana. Mi madre España es la nación de la Fe, del San~ tísimo Sacramento, de la Virgen Inmaculada. Me lo dicen sus teólogos y sabios, sus drama~ turgos y sus artistas. Me lo decían mis padres y me lo dicen mis profesores. El genio de mi Patria es aventurero, -caba~ lleresco, ideal, soñador a lo divino. Tiene la inquietud, la generosidad y el idealismo de Don Quijote, y la alegría, el sentido del vivir de Sancho. Sólo el g~nio de mi Patria ha creado esos personajes. Tiene sus defectos también, pero en mí trabajaré por evitarlos. Sus aventuras han terminado en hazañas in~ mortales y heroicas inspiradas por la fe y co~ ronadas por la Cruz. Entre todas hay una que me exalta de gozo, que es: ¡Mi madre España ha completado el orbe para el catolicismo y para la civilización; ha descubierto y civilizado a América y parte de Oceanía! Y todo este Imperio lo ha rendido ante la Cruz, a los ,pies de Cristo Rey, de la Iglesia Católica. - 113 8

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz