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-130 - alegría, rogad por nosotros.-Aurora del sol de vida, rogad por nosotros.-Reina _de la paz, rogad por nosotros. EJEMPLO.~San Félix de Cantalicio, 'lego c:i.puchino, fué amante apasionado de María. Solía decir que él no sabfa más que seis letras: cinco encarnadas y una blanca. Las encarn:idas eran las cinco llagas de Jesús Crucificado y lfl blanca era la Inmacul:lda Virgen Marfr1. Como camino para la santidad había adoptado la práctica de dejarse guiar por la mano de Iviaría, cual el pequeñuelo , por la de su madre. Y la divina Virgen Je guiab3, por entre las pruebas, las se– quedades y las humillaciones, regalán– .dole con las dulzuras y consuelos qu<i proporciona la vida de intimidad con María. Muy frecuentemente acompañatm al humilde lego la Santísima Virgen junto al Sagrado Tabernáculo donde el santo cantaba las alabanzas de Jesús y María, al mismo tiempo que maceraba con rigu– rosas penitencias su inocente cu·erpo.