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meta. La conversación, muy animada, versa lógicamente acerca del gozo desbordante que inundaría a aquellos peregrinos medievales al pisar donde ahora pisamos, sobre todo, los procedentes de Italia, de Alemania, de Po– lonia ... ¡y con los peligros que les acechaban en tiempos tan remotos ... ! También toca temas más recientes: - ¡Antonio! ¿De dónde ha sacado esa vieira que lleva hoy al pecho colgando de un cordón? -Me la encontré en Frómista, en la fonda de La Marisa; y como me imaginé que sería de algún peregrino que la dejaría allí olvidada, me la metí en la mochila ... - ¡Antonio! Me parece que esas patadas que dabas en el pajar, las dabas adrede para despertarnos y hacernos salir. -¡Hombre! ¡Claro que lo hacía adrede! Pero no se me ha ocurrido otra forma mejor de despertaros sin que me chillaseis.. . Lavacolla. « A Santiago : 9 km.» ¡Ya hemos llegado ! - Ese regacho debe de ser el Lavacolla (43); a ver quién se anima a cumplir el viejo rito ... Pero el agua tiene que estar muy fría a .estas horas de la mañana. -Ese será el Monte del Gozo; ¡Animarse, muchachos! Al primero que llegue le nombramos rey. .. -Y también podíamos cantar el Canto de Ultreya ... Descendiendo a la realidad y a la prosa de la vida, lo más positivo va a ser entrar a desayunar en el primer bar o venta que encontremos, que ayer no cenamos de fundamento. Y eso es lo que hacemos: en el primer establecimiento abierto consu– mimos, siguiendo el gusto de Alfredo, nuestra buena ración de leche con galletas. Sea por aquello de que tripa llena alaba a Dios, sea por la ale– gría que lo envuelve, sea porque se le ha despertado el gusanillo de la música, lo cierto es que uno se pone a cantar, no muy afinado que diga– mos: es la mejor señal para levantarnos todos de la mesa y largarnos cuanto antes, no nos vayan a llamar la atención. En definitiva, ¿qué más nos importa descansar aquí adentro o en los bancos de piedra que nos esperan al otro lado de la carretera? Esta vez ha fallado el truquito y Antonio, que revienta por llegar a Santiago y afeitarse y saludar a los amigos que le aguardan desde an-
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