BCCCAP00000000000000000001775

amazónica y goajira; también su actividad intelectual se ha extendido bien asiduamente al campo del periodismo así como a la participa– ción en congresos, conferencias y otras parecidas reuniones, en las que su personalidad no ha pasado inadvertida, dadas las disaetas cuanto valiosas reflexiones de quien, como Armellada, ni un solo día ha de– jado de sentir y avivar el bien probado afecto que durante tantos dece– nios lo ha unido a sus hermanos los indios. La autoridad que en asuntos de cultura general y sobre todo de lengua y literatura indígenas ha alcanzado este "Padre Indio", ratifi– cada con la publicación de sus diversas obras al respecto, así como lo llevaron, con evidente acierto a que la Universidad Católica "An– drés Bello" le designara director del Instituto de Lenguas Indígenas en la Facultad de Humanidades y Educación, así también le valió el ser llamado por la Academia Venezolana de la Lengua, luego de años de fiel asistencia y colaboración como Miembro Correspondiente, a ocupar ahora sillón de Número. Segura está la Academia de que además de aportar como buen nativo de tierras del reino de León (como el fun– dador de Caracas, Losada) cuanto diga o fuere toque propio y cas– tizo de la lengua española, tendrá sobre todo valiosas credenciales para cuanto concierna a rn1turales dudas y consultas relacionadas con vo– ces indígenas que tienen o tuvieron vigencia o mixtura en el habla castellana actual en nuestro país. ¡Cuánto no habrían deseado, medio siglo atrás, algunos de los lexicógrafos que hubo en esta Academia, haber tenido aquí de colega, con autoridad en lenguas indígenas, a un Armellada, y que sus disquisiciones etimológicas hubiesen contado siem– pre con el seguro criterio de quien estaba familiarizado con las voces indígenas que estaban en estudio! De lo mucho que durante años han investigado, tanto en el cam– po vivo y directo de la misión, como en libros y papeles que rela– tan lo que en el pasado faenaron tantos meritorios predecesores de di– versas agrupaciones misioneras, ha llegado nuestro recipiendario a com– poner esta oportuna monografía histórica, de la que sólo ha podido leernos una parte de su extenso y rico contenido. Su trabajo tiene tan– to el interés como el dramatismo que indudablemente hubieron de darse al ocurrir aquella doble y simultánea labor del entrecruce y com– prensión de cada lengua nativa que el misionero debía de asimilar y conservar con la suya propia, mientras que a su vez él tenía que in– filtrar ésta última en aquellos mismos nativos. Quienes representaban -83-

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz