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negra, ésta se derritió cuando le pegó el fuego, porque estaba hecha de cera. Ante tales sucesos, el Sol, (Vers. 18) amenaza a Tuenkarón con "secar esta quebrada", "voy a secar toda el agua". Finalmente, llega la tercera mujer remitida por la misma Tuenkarón, ésta es de color rojizo (hecha de laja) "como los pedazos de piedra de fuego que suele haber en el lecho de los ríos". (30) Ella se quedó con Wei (luego de haber pasado por todas las pruebas a las que el Sol la sometió y previa autorización de Tuenkarón, a quien va a solicitarle autorización) y procrearon a. los Makunaima. Waranapl: "Los Rayos habitantes de las nubes son pequeñitos, su cabeza es arremolinada (la cabellera), su cara roja; su escopeta, aunque pequeña, da estampidos muy grandes; las nubes son su casa, su techo, su río y hasta su curiara". (Diccionario Pemón, 219). Son los seres que se reconocen con los rayos-truenos y habitan en las nubes o en el cerro Seitá, el cual está ubicado en la frontera entre Venezuela y Brasil. Este cerro se identifica como una de las casas donde habitan los Waranapl quienes, en el tiempo de los grandes aguaceros, van de viaje para proveerse de pólvora y munición de plomo. Por el hecho de vivir en una zona limítrofe estos personajes han asimilado a su forma de vida, e inclusive en su caracterización, elementos provenientes de otras culturas, tal es el caso de la pólvora y de las escopetas (arakabusJ). Ekaremenfn los describe semejantes a "un enano de cara encendida, tienen una escopeta pequefia pero potentísima, la que dispara alas órdenes de sus amigos los mavaricones y produce las grandes tempestades". ("Relaciones Interesantes de la Gran Sabana", (Continuación), (Venezuela Misionera, N° 139, 224). Su presencia en la literatura pemón es frecuente. En el Taurón Pantón, Fray Cesáreo de Armellada los presenta junto a Piaimá-. "Los Piaimá y los Waranapí", (179-183) y los describe, en la Nota N° 2, -según la tradición indígena– "como antropomorfos, habitando normalmente en las nubes. Sus rostros son rojizos, sus cabellos, ensortijados; y son de muy pequefio tamafio. De tal mod_o que a ellos un jején les parece un águila". (183); lomismosepresentaen el Taurón Pantón, II, en el discurso: "Waranapí yamá piaimá dama-re: Los piaimá y los rayos", (40-44). Otro cuento es: "Un rayo-trueno herido", (Pantón mia-toi-kin pemontón vinankón, reproducido, posteriormente en: Pantón Pantón Neke-ré, 19-21). Piaimd: "Ser fantástico, que imaginan vivir en los bosques; es de talla descomunal (en los agujeros de sus grandes orejas, para los zarcillos mete los pies de los indios que carga asu espalda); su vivienda está en barrancas y desfiladeros abruptos. Es antropófago 149