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31 P edro S ánchez C iruelo (1470-1548) teólogo y humanista del siglo XVI dotal y religiosa, que derivará en la reforma de las formas de vida cristiana, en muchos casos impuestas, y que irán dando resultados a lo largo del siglo XVI. En el proyecto original del Maestro Ciruelo la obra estaba pensada en tres partes, aunque cuando la lleva a la imprenta omite la tercera, que no llegaría a redactar para que sus comentarios no se hicieran excesivamente largos. 86 La finalidad de la obra no era otra que ayudar al clero, en vistas a una mayor y más eficaz vivencia de su ministerio; entendiendo que eso se lograba mejor con un conocimiento más profundo de aquello que se celebraba, porqué y cómo se celebraba. 87 Era, por tanto, una preocupación teológica, ascética y pastoral, ante un clero bastante inconsciente de los misterios ante los que era convocado, en lo que podríamos denominar ya como una obra de madurez. Ciruelo afirma que la liturgia ha de reflejar y relatar, hacer viva la historia salutis , por ello propondrá los requisitos necesarios para una digna celebra- ción y vivencia de la misma. 88 Entiende que la liturgia conmemora los múlti- ples y diversos acontecimientos del pueblo de Dios dentro de la historia del hombre. Por lo mismo, las diversas partes de la misa han de ayudar a hacerlo verificable, evidenciando ante los hombres el sentido lineal y teológico de la historia de la salvación. 89 Es bastante probable que, de alguna manera, la tercera parte la desarrollase, más tarde, en una obra que ha llegado hasta no- sotros sin lugar de impresión y fecha: Hore minores clericorum, ad sensum ecclesiasticum familiari et plano comentario declarate . 90 El mismo Ciruelo, en algunos momentos, denomina su Expositio como “oficciorum ecclesiasti- corum commentarii”, 91 en el que da claves de cómo se ha de abordar el estudio y predicación de la Escritura. Para él es claro que se ha de partir del sentido literal, completando con todo lo que recoge la obra de Hamusco y, además, 86 Sánchez Ciruelo, Expositio libri missalis , 270. 87 En este sentido, disentimos de la explicación de Llin Chafer, quien consideraba que se trataba de “una obra sobre la explicación de los textos litúrgicos de la misa de los domingos y días festivos, que facilitaba de este modo a los fieles el leer y meditar, antes de la misa, la epístola y el evangelio del día”. Arturo Llin Chafer, “La Biblia en un testigo del siglo de oro español”, Revista Española de Teología 48 (1988): 196. 88 “… tendere ad commemorandam ecclesiasticam historiam”. Sánchez Ciruelo, Expositio libri missalis , 4, §. 6. 89 “Erunt autem haec nostra principia, quibus totius edificio structura substentatur, verissima et ab óm- nibus doctis fidelibus concesse. Et eis bene intellectis apparebit statit intentio nostri operis principalis. Et inde concipietur spes secure perveniendi ad finem optatum. Hoc est ad verum et litteralem sensum libri missalis et aliorum officiorum Ecclesiae Dei”. Sánchez Ciruelo, Expositio libri missalis , 4, §. 6. 90 Hay una continuidad temática con la Expositio missalis . La presente contiene: Canticum gra- duum; Officium Virginis Mariae; Officium defunctorum; Septem psalmi penitentiales . Se conserva un ejemplar del mismo en la BNE, en la “Sala Cervantes” con la signatura R/2825. Dicho ejemplar proviene de la casa profesa de la Compañía de Jesús. Según la ficha catalográfica de la BNE: “Impreso probablemente en Salamanca, por Rodrigo Castañeda, que trabaja en dicha ciudad entre 1533 y 1538”. 91 Sánchez Ciruelo, Expositio libri missalis , 1v.

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