BCCCAP00000000000000000001767

- 58 - Agora es vuelta a España la gloria de España que... años pasados estuvo adormida. Dicen los que escribieron en loor de ella que, cuando las otras naciones enviaban tributos a Roma, España enviaba emperadores: envió a Trajano, a Adriano y Teodosio de quien subcedieron Arcadio y Onorio, y agora vino el Inperio a buscar el emperador a España y nuestro rey de España es fecho, por la gracia de Dios, rey de romanos y emperador del mundo … El huerto de sus placeres, la fortaleza para defensa, la fuerza para ofender, su tesoro, su espada, ha de ser España 14 . En esta formulación de una ideología política imperial colaborarán también Alfonso de Valdés y el mismo Antonio de Guevara. En este sentido, Carlos es presentado –en exclusividad– como el único líder virtuoso de aquellos tiempos, como servidor de la Iglesia y señor del mundo en lo temporal 15 . En este sentido, Valdés estaba proponiendo un modelo de cristianismo con una fuerte orientación ética, donde estuviera presente la vivencia de un cristianismo intimista y, a un mismo tiempo, una vuelta al Evangelio. En ello afloraba la philosophia Christi erasmiana con fuerza 16 . En este sentido, ya el almirante de Castilla, Fadrique Enríquez había ido aleccionando al soberano de cuál había de ser su conducta por medio de diversas cartas: Con la apelación al temor de Dios, el almirante de Castilla quería que el emperador tuviese siempre presente que, aunque en la tierra nadie podía hacerle sombra, al final de sus días debería rendir cuentas ante Dios, que “es muy mayor príncipe que él”. El temor a Dios no consistía simplemente en un respeto cortés o una sumisión reverencial, sino que era un recordatorio de la vigencia y actualidad de las enseñanzas de Cristo, que le obligaban “más especialmente” que a ningún otro de sus súbditos. Por ello le aconsejaba que leyese y escuchase con frecuencia la palabra de Dios revelada en las Sagradas Escrituras, y que tomase nota de su “santa doctrina” 17 . 14 Ramón Menéndez Pidal, La idea imperial de Carlos (Madrid: Espasa Calpe, 6 1972) 153. A este respecto, Szászdi considera que “fue el deslumbrante presente cortesano de riquezas novohispanas lo que le incitó a evitar un nuevo descuido respecto de sus reinos de Castilla”. István Szászdi, “El Imperio y las Cortes de Santiago de Compostela de 1520. La base ideológica del absolutismo español”, Estudios de Historia de España 10 (2008) 169-170. 15 Constanzo Cavallero, “Visiones de la monarquía universal desde la Castilla de Carlos V en tiempos del sacco de Roma. Los diálogos de un fraile y un humanista”, en Aspectos históricos y cultura- les bajo Carlos V , 436. 16 Acerca de este tema, véase Erasmo de Róterdam, Escritos de introducción al Nuevo Testa- mento , ed. por Inmaculada Delgado Jara y Víctor Pastor Julián (Madrid: BAC, 2019) 140-144. 17 José Joaquín Jerez, Pensamiento político y reforma institucional durante la guerra de las Comunidades de Castilla (1520-1521) (Madrid: Marcial Pons, 2007) 304-305. Carta del almirante de Castilla al emperador (s.f.). Tomado de: Manuel Danvila, “Historia crítica y documentada de las Comu- nidades de Castila, t. V”, en Memorial Histórico Español. Colección de Documentos, Opúsculos y Anti- güedades que publica la Real Academia de la Historia , t. XL (Madrid: RAH, 1900), 339.