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110 ANSELMO DE LEGARDA En Los lagos de San Vicente (2,231b) salen cuatro cuadrillas can– tando con pandero, sonajas, tamboril y gaita. Más arriba se nos despedía del rabel (4,256b) el gracioso libre del potro. A los lugares donde ha sonado la guitarra añadamos otro (2,265b), en que sacan a dos músicos, las guitarras debajo del brazo. En El burlador de Sevilla y Convidado de piedra (1,574c), la pesca– dora de Tarragona enumera los obsequios que recibe de su Anfriso: Ya con uihuelas dulces y sutiles zampoñas músicas me consagra ... Situación parecida a la de La huerta de juan Fernández (1,640b): Canto Y tomando una vihuela ya mi libertad cautiva. Más arriba escuchábamos la distinción entre tonada y letra (2,63). Ambas llegaban a los oídos de los espectadores. Los nuestros o nuestros ojos tienen que contentarse con la letra. La ausencia de la tonada, con ser lo principal en nuestro caso, no nos excusa de un recuento rápido de letras. Un estudio literario examinaría la belleza de los cantos, la ri– queza métrica y otros aspectos. La voz humana sola campeaba en muchos momentos: noche de San Roque en La Sagra (l,3llab); Margarita maldita (2,375b); la de un pobre ante un crucifijo (3,40b ); cantará la verdad, será gallo (3,84b ); cantando endechas al prado (3,96a); con la señal de la cruz (4,87ab); contra-pobres y calvos (4,380a); más valéis vos, Antona, con mención de Duero y Tudela (5,218ab); por esta calle que voy, ronda (5,330b); canto, presagio de llanto (1,583a); qué largo me lo fiáis (1,586c); naci– miento de Venus (1,714b); amor, «pájaro dios» (1,715a). Unas veces la voz brota de gargantas de aficionados, pero otras se nos previene que son músicos los que cantan: el que un bien gozar es– pera (1, 580c); lindo sale el sol de abril (1, 582b); madre, la mi madre (2,97a); florecitas que Rut bella pisa (2,292a); que el clavel y la rosa (6, 123b). Hay cantos con estructura clara de zéjel o villancico: estribillo, mu– danza, vuelta, estribillo: Buenas eran las azucenas (1,21). Ello exige ahí y en otros lugares que se vayan turnando solista y todos: Novios son El– vira y Gil (3, 177-178); Trébole danle al niño (3,260-261); o dos solistas y coro: El Comendador (3,249ab); Alma perseguida (6,65a); o solista y [38]

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