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Esas tenencias fueron eventuales y «en honor», más no auténticos señoríos. Está en cambio comprobado que aquel Essemenes o Ximeno Fortuñones era señor de Baztán en 1119 y en octubre de 1131 (Lacarra), cuando el propio don Alfonso el Batallador tenía a gala reinar sobre tales vasallos: «Regnante me, gratia Dei, in Aragone, in Pampilona, in Alava, in Baztan, in Ripagorza et in Pallars» (fuero de Asín, 4 de marzo de 1132). Hay otro testimonio que me parece digno de reflexión: los escudos de armas de Baztán y de los Jaureguízar de Irurita coinciden, salvo un detalle. Es este Jaureguízar el único de los doce antiguos palacios de cabo de armería cuya heráldica se confunde con la del valle: el jaquelado en plata y sable o escaqueado de ajedrez. Según viejas crónicas, que recoge Argote de Molina, cuando el rey don Sancho Abarca estaba preso de los franceses, lo libraron Alonso González de Baztán y los señores de Morentin, Aybar y Lodosa. Y por esto les concedió el rey, al primero, «un axedrez», al segundo tres dados, al tercero un escudo de oro y al último un escudo de lágrimas. Cuando Baztán protestó contra Pierres de Jaureguízar por la autonomía de su escudo municipal, fallaron la corte (5 de agosto de 1572) y real consejo de Navarra (31 de enero de 1573) que el del noble valle y universidad de Baztán era «de axedrez escaqueado, blanco y negro, sin orla alguna»; y declaró serle propio y de ningún otro. Y que las armas de la casa y palacio de Jaureguízar en Baztán eran «el escu- do de axedrez escaqueado, de casas plateadas y negras, con orla de gules, que es colorada». Pero entre la forma- ción de los escudos y la sentencia de la corte y consejo habíanse atravesado hechos y siglos. Los gules de Jaure- guízar fueron orla ganada por Gonzalo lvaynez o Ibáñez de Baztán en la conquista de Baeza (1227). Fernando lll añadió al escudo de los 500 caballeros que le acudieron en aquella empresa, la bordura de 8 sotueres o aspas de San Andrés en campo de gules. Este Gonzalo Ibáñez de Baztán figura el primero entre los 500 caballeros, tras el jefe de la expe- dición, don Lope Díaz de Haro, señor de Vizcaya. GOBIERNO POLITICO La universidad del Baztán histórico «se compone de ca- torce pueblos blancos, pulidos y enjoyados de nostálgica dulzura, como los catorce versos de un perfecto soneto, clásicamente cincelados» (F. Urabayen). Desde el uno de abril de 1969, soneto con estrambote, por la incardinación de la no menos pulcra y enjoyada villa de Maya, nacida y crecida al socaire del castillo real de Mayer o Amayur. La unidad jurídico administrativa de este valle ha sido no menos vinculante que la estructural de un soneto clásico. Como «alcalde de la hermandat de la tierra de Baztán» firma el escudero Martín o Machín Pérez de Yrigoyen, la concordia de 1443 entre los premostratenses de Urdax y los vecinos de Zugarramurdi. Organismo supremo, político y administrativo, de dicha entidad jurídica, es la junta general del valle, que cuatro veces al año se reúne en bazarre ordinario. Actualmente la constituyen el alcalde como presidente, — 20 —

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