BCCCAP00000000000000000001733

del real y aguantó la vigilancia de su castillo por agentes del rey. En 1515 dejó de existir el Dr. Juan de Jasso. En su «Crónica de los Reyes de Navarra» había con- signado en breve frase su ideario político de agramontés, al desaprobar la conducta del Principe Carlos frente a su padre Don Juan de Aragón en la guerra civil iniciada en 1450. «Y el Principe Carlos, dice, puso mucha discensión en el Reyno, porque quería heredar en vida de su padre...». Por lo visto en don Juan de Jasso, doctor en ambos derechos y frente al Fuero de Navarra, privaban otras razo- nes políticas más poderosas para que señores extraños al reino ocuparan un trono que sólo al Principe correspondía en derecho. Juan de Aragón, viudo de la reina Blanca de Navarra, había casado en 1447 con Juana Enríquez, hija del almirante de Castilla. El Príncipe Carlos tenía 29 años; como para esperar a heredar a su padre, que murió en 1479. JAVIER Y AZPILCUETA DESDE 1516-1529 Con la muerte del Dr. Jasso desaparece en parte de Javier la mesura diplomática en los acontecimientos que se avecinan. En parte, porque María de Azpilcueta comparti- ría el criterio de su marido, aunque, dificultada por el espíritu ardoroso de sus jóvenes hijos, lejos todavía del matrimonio. Llegó el año 1516, que trajo a Javier y Azpilcueta la desfortificación y la ruina. La muerte de Fernando el Católico provocó un comienzo de reacción reconquistadora en los reyes destronados, que sofocó rápido el cardenal Cisneros, regente del reino cas- — YD —

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz