BCCCAP00000000000000000001724

EL CONVENTO FRANCISCANO DE SANTA MARÍA DE LA PAZ DEL SOTO (VILLANUEVA DE CAMPEÁN) 383 El crucero se cubría con cúpula sobre pechinas y los brazos con bóve– das de medio cañón, descargadas sobre sus correspondientes pilastras ca– jeadas. La nave también volteó bóveda de medio cañón con arcos fajones que cargaban sobre ménsulas adornadas con placas. La fachada principal, junto al imafronte, es la mejor conservada. Su si– llería es isódoma, buena. Con puertas adinteladas, todo el hastial se divide en calles por pilastras estriadas en el cuerpo bajo, mientras que las del su– perior adornan sus fustes con sartas de frutos y flanquean, en las calles la– terales, hornacinas aveneradas y rematadas con frontones partidos que se apoyan sobre pilastrillas festoneadas. En estos nichos, con roscas y albane– gas muy decoradas, se guarnecen dos esculturas de piedra, decapitadas, por lo que una resulta inidentificable, mientras que la otra parece ser san Fran– cisco de Asís; bajo la hornacina y sobre placas recortadas, se labró el sím– bolo franciscano de los dos brazos cruzados, bien señaladas las llagas de Cristo y las de san Francisco (el "Alter Christus" del medioevo). Un rosetón pétreo de la Inmaculada Concepción, patrona de toda la orden franciscana, corona el tímpano del frontal con lejanos ecos del es– cultor Gregorio Fernández. Parece probable que los canteros fueran compostelanos; su barroco lo confirmaría. Un entablamento con triglifos y metopas florales da paso al ático, re– matado en un frontón que enmarca toda la fachada. En línea con la fachada de la iglesia se levantó la entrada principal al convento, con materiales más humildes, mampostería y reservando la sille– ría para jambas, dinteles y cornisa. Del interior del convento, mucho más deteriorado, sólo destaca una crujía en piedra del claustro, apreciándose, no obstante, los arranques de las otras. Sería pequeño y cuadrado con cuatro arcos por lado, de medio punto que descargan sobre pilares octogonales 67 . Nos podemos preguntar, entre otros asuntos, que estamos intentando iluminar, sobre las posesiones del convento. Bien; sabemos que todas las comunidades religiosas nacían en torno a una propiedad que una persona donaba. Con el tiempo, por los trabajos de los frailes, por los testamentos que recibían, por sus rentas se iba formando un patrimonio. En 1835, año de la exclaustración de Mendizábal, que analizaremos con detalle más adelante, el convento de Santa María de la Paz del Soto tenía en propiedad 67. José Ramón Nieto González, Ca1álogo monumemal del par/ido judicial de Zamora, Madrid 1982, 338. En este interesante libro hay seis fotos del convento; sus números van del 438 al 443. De la iglesia e imágenes de Villanueva existen cuatro fotos. En esta descripción artística, tan bien lograda, el autor avisa sobre la decadencia del con– vento y del peligro de su derrumbe total si no se le restaura.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz