BCCCAP00000000000000000001724

EL CONVENTO FRANCISCANO DE SANTA MARÍA DE LA PAZ DEL SOTO (VILLANUEVA DE CAMPEÁN) 375 y medio. Fran Francisco de Valderrama dijo que tenía seis cuartos y medio, sin uno que él debía al convento. Fray Antonio de Ledesma dijo que tenía nueve maravedís y que no tenía más que declarar. En el documento final de la visita se afirma: "ltem que porque se entendía que fray Francisco Feo, ministro que era de aquella casa, había llevado algunas cosas, las cuales se sospechaba de– bían estar en algunos lugares de la comarca ". 49 En cuanto a las fundaciones de Misas u otras dotaciones, "los frailes re– ducidos dicen que se decían ordinariamente desde que ellos están allí, que no es mucho tiempo, una Misa cantada el sábado y otra el lunes y una reza– da de Pasión el viernes, que no saben si es dotación, aunque piensan que sí". Luego, el juez y canónigo Alonso Acero, mandó a los frailes que que– daban en este convento: fray Pedro de Morales y fray Francisco de Valde– rrama que prestaran obediencia a fray Jorge de Sauceda. El hermano lego, fray Antonio de Ledesma huyó y no lo pudieron encontrar a pesar de ha– berlo buscado. Pero esa obediencia no sale de sus bocas. Por segunda vez el juez les manda que dieran la obediencia "según la forma que les está mandado", a lo que los frailes no contestaron. Por tercera vez, el juez les manda que den la obediencia como se les ha mandado, con apercibimien– to que si no lo hacían serían entregados en manos de la justicia secular. Fray Pedro de Morales dijo que daba la obediencia al obispo de Zamora pero no a la orden franciscana de la observancia, cuya regla no podía ob– servar, mientras que fray Francisco de Valderrama dio la obediencia a fray Jorge de Sauceda y al provincial observante fray Antonio Gutiérrez. Debi– do a que fray Pedro de Morales se niega a dar la obediencia, el juez Acero, manda a Miguel de Boñar, alcalde ejecutor de la ciudad de Zamora, que aparece ahora por primera vez en la visita, que lo lleve preso a la torre episcopal; y así lo hace. El fraile observante, fray Jorge de Sauceda, llevado de la mano por el canónigo Alonso Acero, tomó posesión de la iglesia, del convento y de to– dos sus bienes y entregó éstos a Pedro Montero, vecino de Villanueva de Campeán, "todos los dichos bienes raíces, ganados, frutos y reventas de ellos para que los tenga en secreto", lo que Montero acepta. 50 Conforme la reforma avanzaba, este paso de frailes terciarios a la ob– servancia y el paso de las monjas de la tercera a las clarisas, había más dis– conformidad en el ambiente. En Roma se extendió la opinión de que la Corte española se estaba entrometiendo demasiado en la vida de los reli- 49. Archivo Diocesano de Zamora, legajo 332, doc. 8 (en una hoja suelta). 50. Cf. José Sánchez Herrero,"Beguinos y tercera orden regular de san Francisco en Cas– tilla" en Historia, instituciones, documentos, 19, 1992,433-436.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz