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EL CONVENTO FRANCISCANO DE SANTA MARÍA DL LA PAZ 261 surgen principalmente a partir de 1395, conventos y eremitorios de la tercera orden, favorecidos por Benedicto Ill que buscaba, además de la reforma general, núcleos de apoya para su obediencia. Desde 1403 el fenómeno de las casas de vida común se extiende también a las terciarias. Se trataba en ambos casos, de personas célibes o vida que ya habían profesado la tercera regla y que optaron por una mayor perfección religiosa en casas levantadas frecuentemente junto a hospitales o eremitorios» 19 . Los documentos pontificios son casi la única fuente por la que comprobamos que se erigen casas o se confirma una erección anterior. Los conventos o casas de varones en Castilla, León y Galicia, formaban ya en 1403 una congregación; nos lo demuestra el que el 9 de septiembre de dicho año, Benedicto XIII, en sendas bulas, se dirige «al general y otros ministros y a todos los hermanos de la tercera orden». La hospedería medieval del convento de Santa María del Soto es normal que funcionara dentro de una orden religiosa franciscana penitencial. «A lo largo del célebre «camino de Santiago» existía una tupida red de hospitales para pobres y peregrinos, algunos de ellos fundados o regentados por comunidades de la tercera orden» 20 . Estos conventos de terciarios regulares se extendieron rápidamente por el noroeste peninsular. El servicio a Dios en sus eremitorios y la asistencia a los pobres y enfermos en sus hospitales fue, como ya hemos señalado, su principal trabajo apostólico. Cada casa o comunidad era autónoma. A principios del siglo XV no hay indicios de que estos eremitorios estuvieran bajo la jurisdicción de los provinciales de la primera orden franciscana. Sus superiores eran de la tercera orden franciscana. Ello lo podemos ver en el breve de Benedicto xm «Sincerae devotio» de 9 de septiembre de 1403, ya que si dirige al ministro general y demás ministros de la tercera orden de Castilla y León 21 . Con la decretal de Eugenio rv, «lniunctum nobis» del 6 de febrero de 1443, dirigida a los terciarios regulares de Castilla y León que hacen vida en común en sus conventos, el papa les dice que en sus capítulos generales elijan un religioso sacerdote para el cargo de visitador, que sea visitador de todo. con autoridad suprema sobre terciarios y terciarias regulares. El oficio duraría 3 años. Aquí no se dice nada de que los terciarios regulares estuvie- 19 Isidoro de Villapadierna, «ur tercera orden fra11cisca11a en l'i siglo XV» en /1 mo,•imemofra11celcm10 della pl!llite11::11 ne/la societii medioe,,ale, Roma 1980, 125-126. 20 Isidoro de Villapadicrna. Ibídem, 135. 21 Cf. Manuel de Castro, •La provincia fra11cisca11a de Santiago. ocho siglos de histo– ria», en liceo Fra11cisca110, 106-108 (1983) 254.

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