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ARTICULOS Fraternidades Contemplativas Franciscanas de ayer y hoy Fr. Francisco Jiménez, ofm cap. En el mes de mayo de 1977, tuvo lugar en la ciudad de Nápoles el primer encuen– tro nacional sobre las casas de oración en la historia de la Orden franciscana. Una contribución apreciable de las conferencias y de los debates fue la de aclarar la termi– nología. Así, en lugar de "domus orationis", casa de oración, de reminiscencias bíblicas, la tradición franciscana prefiere denominar a esta institución con el nombre de frater– nidades de retiro. Las relaciones históricas pusieron de re– lieve el extraordinario y constante influjo del elemento eremítico en san Francisco y en las reformas franciscanas. Ha sido con– tinuo el anhelo de soledad y el deseo de re– tirarse a Jugares solitarios para dedicarse con mayor intensidad y libertad a la ora– ción contemplativa. Se aclaró también que cualquier intento moderno de experiencia franciscana de ora– ción no podrá olvidar la importancia fun– damental de la Regla para los eremitorios. Este breve texto de san Francisco será para la Orden una fuente perenne de continua inspiración. Siempre en la línea de las fuentes primi– tivas, el encuentro de Nápoles subrayó la importancia del eremitorio de santa María de la Porciúncula como modelo de vida y programa espiritual que debe inspirar a to– da fraternidad de retiro. Referente a la legislación actual, se estu– diaron las Constituciones renovadas de las familias franciscanas y se constató que en todas queda definitivamente garantizado el derecho a la existencia de las fraternidades de retiro. El encuentro terminó, sin embargo, evi– denciando que a la afirmación de principio, no corresponde todavía una amplia y segu– ra realización en el campo práctico ( 1) . (1) Cfr. AA. VV., Le case di preghiera nella storia e spiri– tualita francescana, Ed. Dehoniane, Napoli, 1978. 14 La presente comunica'Clon se sitúa en la línea de las realizaciones, ya que es el re– sultado de una aproximación a la realidad vitad de la familia franciscana. Recoge el testimonio de tres experiencias de fraterni– dades de retiro, dos capuchinas y una fran– ciscana. Las tres, comprometidas a llevar a la práctica la letra y el espíritu de la Regla de san Francisco, adaptándola al contexto socio-cultural de la época presente. Todas, en fin, estimuladas y sostenidas por la nue– va legislación de la Orden que invita, enca– recidamente, a realizar estas experien– cias (2). En esta relación he creído oportuno, pa– ra establecer la unión entre el pasado histórico y el momento presente, dedicar la primera parte de esta reflexión a la imagen y al contenido espiritual de las primeras fraternidades contemplativas franciscanas a partir de los mismo escritos de san Francis– co. Es allí donde se encuentra la fuente de inspiración a la que han acudido, con ma– yor o menor acierto, todos los movimientos de reforma franciscana. Analizaremos, pues, aquellos escritos de san Francisco, en los que aparece la termi– nología a la vez que la inspiración de la expe– riencia contemplativa. PRIMERA PARTE: FRATERNIDADES CONTEMPLATIVAS DE AYER La fraternidad contemplativa en los escritos de san Francisco Es significativo que el término "eremus" o "eremitorio" sólo se encuentre tres veces en los escritos de san Francisco: en el ca– pítulo VII de la Regla no Bulada, en la Re– gla para los eremitorios y en la Carta a un Ministro. Analizaremos el contexto en que se encuentran estas palabras para obtener así una imagen de la fraternidad primitiva y el contenido espiritual de la misma. (2) Cfr. Constituciones Generales OFM., art. 28-31; Consti– tuciones Generales OFMConv., n. 76, 3; Constituciones Generales OFMCap., n. 43.