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LA Nl/EVA SOCIEDAD el crecimiento económico, con • la correspondiente elevación del nivel de vida, que ha modificado el modo de ver las cosas, si bien es pre– ciso reconocerlo no todos .disfrutan de él dado el reparto desequili– brado personal, :regional y sectorialmente; - la concentración .industrial que ha llevado consigo la creación de gran– des masas de población viviendo en torno a las empresas («urbani– zación»); --- las sociedades multinacionriles 25 • Todos estos factores modifican .las relaciones humanas y la inserción en unas estructuras, leyes y planificaciones muy diferentes a las experi– mentadas anteriormente. De ahí su influjo en el cambio social. C. La política Entendemos la política, como factor de cambio, la forma concreta .que adopta el poder y su organización. Así lo defiende Ralf Dahrendorff po– niendo al poder como punto de partida para su teoría sobre el cambio. Claro que es preciso reconocer que no todas las formas políticas influyen de igual forma en el mismo.· Entre los factores «políticos y sociales>> que están influyendo más fuertemente en el cambio social señalamos: - El paso de la concepción Este-Oeste a la de Norte-Sur. «Al término de la segunda guerra mundial y durante la década de los cincuenta predominó la consideración del sistema ideológico (liberalismo-sociá– lismo) como el elemento determinante de las diferencias entre los países (incluso políticas), y geográficas se localizaban. estas diferencias en el Oeste y el Este, respectivamente; pero poco a poco se fue reve– lando que el verdadero antagonismo que atraviesa el mundo lo cons– tituye la oposición entre ricos y pobres, entre los que controlan el poder (económico, político, militar e ideológico) y los que carecen de él; esta oposición se localiza geográficamente, de un modo aproximado, en el Norte y el Sur, respectivamente. Por esta razón. algunos prefieren hablar únicamente de dos bloques (Norte-Sur) u otros señalan cuatro; distinguiendo también entre los países del TM los que se inclinan por el socialismo y los que siguen el esquema del desarrollo capitalista» 26 • 25 Pro mundi vita. Boletin, n. 75, nov.~diciembre 1978, trata amp!iámente el tema, incluso el hecho de que las Iglesias se sitúan ante este fenómeno de las multinacio– nales, pp. 20-31. 26 MUNDO MEJOR, Respuesta cristiana al .reto de nuestro tiempo, Madrid, 1978, p.• 17s.
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