BCCCAP00000000000000000001663

-62 - . 2. RELACION SOBRE EXPERIENCIA DE VIDA EN EL NOVICIADO VIDA ITINERANTE EN PITBUFQUEN Reverendo Padre: Cumplo con el deber de hacer llegar a usted y hermanos esta relación acer– ca de la vida Itinerante aue llervaron los novicios en el mes de Febrero en la Panoquia ,de •PitrU!f'quén. 1.- Fecha de salida: los novicios sa– lieron de la casa noviciado el 8 de Ene– ro a Santiago paira saludar al Hermano General, que venía a visitarnos a Chile. Fue un encuentro inolvidable para los novicios, en el que pudieron ,constatar el ex¡quisito espíritu :fraterno que anima a nuestro Hermano Pascual. Pudieron palpar plásticamente la vi,v;encia fran– ciscana de la fraternidad; también apro– vecharon para tomar contacto con los hermanos del Comisariato de Chitle, quienes se encontraban reunidos para su pdmer Capítulo. Después de este encuentro, fueron cada uno a sus casas a pasar unos días de vacaciones con sus familiares. El día 20 de Enero se encon:tmron to~ dos en la Parroquia de Pitrufquén. La estadía del noviciado en eS'ta parroquia se debió a dos razones: a) El Padre Francisco Lausmann, pá– rroco de Pitrurfquén tenía que ir de va.. caciones a Alemania. Los hermanos Pastor y Juan Cando se ofrecieron parn suplirlo hasta los primeros días de Mar– zo. b) Aprovechar esta oportunidad pa– ra realizar en aquella región la vida de itinerantes; uno de los estüos de vida más genuinos de la vida Franciscana. 2.- Preparación: Desde el 20 de Ene– ro hasta el 4 de Febr,ero ·s•e ,dedicó el No– vkiado a prepararse intensamente pa– ra emprender •esta vida, de por sí muy difícil. Mientras se esta:ba en la casa parro– quial, además de atender la parroqui8., el noviciado tuvo su vida normal. Sirvió su permanencia •en esta casa para fo- mentar la vida fraterna. Todos los her– manos hacían todo: desde la cocina, el lavado de la ropa, aseo de la casa, hasta los ministerios ·propios de la vida pa– rroquial. Ha1bía clases de preparación para el estilo que íbamos a emprender. 3.- lAl viJda 11nisma: De acuerdo a lo programado, ,el lunes 5 de Febrero sa– lieron los hermanos de dos en dos, por las diversas :z¡ona:s de la parroquia (zona rural) a recorrerla, predicando fa Bue– na Noticia del Reino. Por principio no nos pres,entáibamos como religiosos ni •como sacerdotes. Pe– ro si preguntalban quiénes éramos, no negábamos nuestra identidad. Estábamo 1 s toda la semana fue,ra, dur– miendo donde la caridad nos dep,a:-aba a1bergue y comiendo lo que la Mesa del Señor nos tenía preparado para cada ocasión. El viernes en la tarde o el sáibado en la mañana, a más tardair, estáJbamos to– dos de vuelta en casa. ~ra maravililoso este encuentro. iCómo lo deseáibamos de.s1pués de es:tar una semana ausentes! Be hacía realidad lo que dicen las bio– grafías primitivas acerca del encuentro de los hermanos donde el Bienaventu– rado Padre Francisco. Contábamos nuestras experiencias, aventuras, éxitos o fracasos. Nos alegrábamos en el Señor celebrando la Eucaristía con especial fervor, dando gracias al Padre por todo. Siempre quedaba un hermano sacer– do~e en la parroquia en la semana, para atenderla. En muchas partes no eran bien reci– bidos los hermanos, ya que eran toma– dos ,por personeros de la ECA o de CO– RA. ,El campesino de aquella zona está mu:y resentido con estas entidades por el fammo estanco del trigo. En ningún momento se tocó el tema político, para no desvirtuar ·el mensaje evangélico. Si alguien lo tocaiba, cortés-

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz