BCCCAP00000000000000000001638

SAN ANTONIO EN LA DEVOCIÓN DE ESPAÑA 165 Parece que hubo un momento de duda sobre a quién dedicar la capilla, ya que en el tiempo de espera hubo un recurso espiritual muy preciso a la intercesión de Santa Teresita de Lisieux para superar las dificultades burocráticas que retardaban el asentamiento regular de la nueva fraternidad al servicio del pueblo pamplonés. El libro de Crónica del convento aporta cándidamente la solución y el motivo: "La capilla se dedica a S. Antonio en vista del gran éxito logrado en Zaragoza por los nuestros en la capilla que se dedicó al Santo Taumaturgo en la capital aragonesa". Y continúa mostrando cómo no se equivocaron en escoger patrono: "A pesar de ser una capilla muy pequeña e irregular, muy pronto empezó a ser conocida y frecuen– tada por los fieles la capilla de S. Antonio, principalmente por los habitantes de la colonia Argaray, que estaba muy cerca y aun por los de más lejos. Pronto se hizo famosa por la asistencia de la gente, y aun conocida por la gente de los pueblos. Buena prueba del ambiente que se formó acerca de esa capilla y de la frecuencia de la gente a las Misas y comuniones, es el hecho de que el primer año de la instalación se distribuyeron 45 .000 comuniones y al año siguiente 75.000". El calendario religioso de la capilla muestra la intensidad singular que adquirieron en ella los actos en honor de S. Antonio: los días 13 de cada mes se dedican a S. Antonio, de modo que la devoción de los 13 martes se practica sin interrupción; en los primeros días de febrero se celebra un solemne triduo recordando la Traslación de S. Antonio; y, naturalmente, la culminación de este culto ininterrumpido llega todos los años con la novena y la solemnidad de S. Antonio el 13 de junio. El cronista habla de un "golpe de gracia" de la comunidad de S. Antonio en Pamplona. "Las gentes, escribe, de todas las clases, eda– des y condición se hacen lenguas de lo bien atendida que está la iglesia, especialmente con las confesiones. No se conocía cosa igual. Los Padres tienen que prescindir de aceptar compromisos de predicación y apostola– do por los pueblos o la misma ciudad". Se trae la comparación evangélica del grano de mostaza para indicar el crecimiento de los comienzos humildes y azarosos. El 13 de junio de 1939 se pone la primera piedra del nuevo y espacioso templo, que se inaugura el 28 de junio de 1940. Unos versos de C. Damoborena resumen la emoción y esperanza de ese día: Hoy te comprimen las turbas, Antonio, con sus plegarias