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294 P. ANSELMO DE LEGARDA et extende super mare et divide illud ut gradiantur filii Israel per siccum Cl7). ¿Hubo más? Sí, señores. Una columna de luz mara– villosa les servía en el camino de guía, al mismo tiempo que los armaba en fortaleza. Nunquam defuit columna ignis, ut dux esset populi (18). De modo que con la luz de la columna veían el camino de su libertad maravillosa. A más de esto, al ver que en el camino de su libertad se fatigaban, para aliviarlos en sus penas, para alen– tarlos en sus congojas y para que esforzados siguiesen con empeño el empeño, de la libertad conseguída, les bizarreó la divina virtud en el maná milagroso un alimento del cielo que, armándolos de esfuerzo en el camino, causó el asombro mayor a todo el pueblo, aJ. mismo tiempo que los llenó de extraño gozo: Manhu, quid est hoc? (19). Los alentó con alimento tan divino, que les dio fortaleza en sus desmayos, como el mismo Moisés los declaró a la admira– ción del pueblo: iste est panis quem dedit vobis Dominus ad ves– cendum (20). 141 De este modo con los prodigios maravillosos de la vara en manos de Moisés, capitán de su libertad famosa; con la luz que en la columna los guiaba y armaba de fortaleza, y con el alimento del maná que, reparando sus fuerzas, les aumentaba su esforzada valentía, lograron ver el fin de aquella su libertad tan deseada. Y por eso, con razón agradecidos, entonaron alegres cánticos de ala– banza: Tune cecinit Moyses, etc. Dime ahora, a vista de esto, pueblo famoso: ¿ cuál es la causa de este regocijo, tan extraño en que se expresan todos los corazo– nes de tu pueblo? Me habrás de confesar que es la misma que el sagrado texto te manifiesta en diseño, pues veo que para tu alegría te impele semejante motivo y para rendir expresivas. gracias al Altísimo tienes la misma causa que aquel pueblo dichoso y fino. Dime: ¿no eres tú aquel pueblo que en lo antiguo, en atención a las heroicidades de tus hijos que en mar y tierra se ostentaron tan famosos, te conservaron en libertad por muchos siglos, como lo manifiestan las antiguas memorias de tus archivos? Y ¿no es también seguro que después, por acasos de la fortuna inconstante, perdiste tu libertad? Pues sabe que esto mismo sucedió con el pueblo de Israel que fue libre en su principio, siendo sus. ascen– dientes famosos en nobleza, en heroicidades, en prodigios, y des– pués faltán.doles en José un gran caudillo, vinieron a perder su libertad y sujetarse a otro dominio (21). (17) Ex 14, 16. (18) Ex 13, 22. (19) Ex 16, 16. (20) Ex 16, 16. (21) Ex 1, 8.

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