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408 «... el Señor me dio hermanos» sos, del pueblo y de la casa de Sabaya se iniciaron en la curia episcopal de Turín los procesos sobre la fama de santidad, vida, virtudes y milagros del siervo de Dios. En 1782 la causa fue intro– ducida en la Santa Sede que ordenó los procesos apostólicos. El 19 de marzo de 1827 León XII declaró solemnemente la heroicidad de las virtudes del padre Ignacio. Finalmente, después de la aproba– ción de dos milagros, el 17 de abril de 1966, Pablo VI procedía a la solemne beatificación. En ese día el papa definía al padre Ignacio como un verdadero franciscano, un auténtico capuchino y decía entre otras cosas: «La Iglesia le saluda hoy como un religioso admirable en cualquier as– pecto de su vida franciscana. De él se ha escrito con toda agudeza que fue un religioso 'siempre disponible', porque justamente todo momento de su vida franciscana y toda manifestación de su activi– dad apostólica demuestran que esta variedad en cualquier virtud, tanto interna como externa, puede transformarle en ejemplo para todos ... Tengamos, pues, presente en nuestra veneración a este nuevo hermano del cielo y que nos ayude a todos con su ejemplo, con su protección a seguir el sendero que lleva al cielo». NOTA BIBLIOGRAFICA AUTOGRAFOS DEL BEATO: Lettere; Testamento e ultime volanta; Testamento dell'anima; Esercizio del cristiano e del religioso; A vvertimenti da darsi ai chierici. Positio super dubio an sit signanda Commissio Introductionis causae. Roma 1782. Positio praeparatoria super virtutibus. Roma 1824. Piergrisologo da Castiglione D'Asti, Vita del ven. Servo di Dio P. Jg– nazio da Santhia. Turín 1790. Cario Filippo da Poirino, JI venerabile P. Jgnazio da Santhia. Turín 1853.