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374 GERMÁN ZAMORA Meil!Ción aparte ha merecido la « reforma » capuchina, a la que se dedican dos estudios, relativamente breves, firmados por B. Strack y M. Baderhuber e, incidentalmente, una nota, a más de la página obligada sobre su origen y constitución en el ensayo complexivo de E. Onorati 33 • Sobre la II orden no aparece ninguna relación ex profeso, pero sí un largo estudio sobre santa Clara y numerosas alusiones dispersas, casi siempre en conexión con la I 34• Del origen, apogeo, decadencia y renovación de los terciarios seculares se ocupa H. R. Roggen 35 • Junto a esa expansión del franciscanismo medieval, calificable, en buena medida, de horizontal, hay que mencionar la que operaba en profundidad, potenciándola, y que está formada por sus figuras más señeras, a cuya historia individual se consagra un capítulo: los santos Antonio de Padua, Buenaventura, Luis de Anjou, Bernal'dino de Sena, Juan de Capistrano, las santas Clara de Asís e Isabel de Hungría y la beata Inés de Praga. De modo parecido se evocan la vida y obra de Bertoldo de Ratisbona y Marcos de Aviano 36 • Entre las actividades de los franciscanos reseñadas destacan la misional, la filosófico-teológica y su presencia en las Cruzadas 37. Anfiingen bis zum Einsetzen der Observanz, en Cat. IV, 289-306; Rainald Fischer, Der Franziskanerorden im Gebiet der heutigen Schweiz wiihrend des Mittelalters, en Cat. IV, 307-311; Ferenc Hervay, Geschichte der Franziskaner in Ungarn bis zum Beginn der Refor– mation, en Cat. IV, 312-317; Jerzy Kroczowski, Die Minderbrüder im Polen des Mittelalters, en Cat. IV, 318-331; Hugo G. Rokyta, Miszellen zu den franziskanischen Orden in den bohmischen Liindern, en Cat. IV, 332-336; Johannes Gründler, Zur Geschichte der franzis– kanischen Orden in den bohmischen Liindern, en Cat. IV, 335s. Indirectamente habla de la difusión de la orden en otras dos naciones Marco Asirelli, II movimento francescano e la Francia, en Cat. III, 310-318 y L'ordine francescano e l'lnghilterra, ib. 319-322, pero el interés del A. se dirige a la historia de la miniatura franciscana en esos países, de la que analiza algunas fichas. La presencia casi ubícuota de las órdenes franciscanas y sus residencias en los territorios de lengua alemana y países orientales adyacentes, primero de 1300 a 1517 y Juego de 1560 a 1981, se ilustra con sendos mapas, obra de J. Gründler e I. Grillmayer; cf. también, ib. 280, sobre los conventuales. 33 Bonifatius Strack, Der Kapuzinerorden - seine Entstehung, en Cat. IV, 344-348; Ma– nuel Baderhuber, Tiitigkeit der Kapuziner in Geschichte und Gegenwart, ib. 353s; cf. también Cat. VII, 45; VI, 22s y 30; IV 265s. 34 Chiara Augusta Lainati, Die heilige Klara von Assisi. Leben und Schriften, en Cat. IV, 99-121; cf. también Cat. I, 21 y 23; IV, 764-768. 35 Heribert R. Roggen, Bedeutung und Wirken der franziskanischen Terziaren, en Cat. IV, 337-343; ib. 139-149. 36 Vergilio Gamboso, Sankt Antonius von Padua, en Cat. IV, 122-129; Werner Dettloff, Leben und Wirken des heiligen Bonaventura, en Cat. IV, 130-138; Jacques Paul, Der heilige Ludwig von Anjou, Bischof von Toulouse, en Cat. IV, 157-168; E. Onorati, Der heilige Bernardin von Siena (1380-1444), en Cat. IV, 181-199; He!mut Hundsbichler, Johannes Kapistran. Franziskanische Observanz - Rettung Europas - Sachkultur, en Cat. IV, 200-207; Palmatius Sii.ger, Der Weg der hl. Elisabeth von Thüringen (1207-1231), en Cat. IV, 139-149; Johanna von Herzogenberg, Agnes von Bohmen, Elisabeth von Thüringen, Hedwig von Schlesien. Versuch eines Triptychons, en Cat. IV, 150-156; Georg Steer, Leben und Wirken des Berthold von Regensburg, en Cat. IV, 169-175; Fidelis Krautsack, Der Kapuziner Marcus von Aviano und die Rettung Wiens 1683, en Cat. IV, 349-351. En la línea de esas grandes figuras del franciscanismo se echa de menos la de san Lorenzo de Brindis, entre otras. 37 Bernward H. Willeke, Die Franziskaner und die Missionen des Mittelalters, en Cat. IV, 221-231; Otto Maza!, Der Franziskanerorden und die Wissenschaft, en Cat. IV, 743-748;