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452 BERNARDINO DE ARMELLADA su umon con el conocimiento de Dios, a la vez como principio primero y como objeto primero del conocimiento (238). Pero lo que parece particularmente interesante en este texto es que reco– ge y lleva a su pleno desarrollo la vía seguida en Cuest. sobre el mist. de la Trinidad para mostrar que la existencia de Dios es la primera y la más evidente de todas las verdades: la de la oposición total que reina entre el omnino esse y el omnino nihil. En los dos capítulos 5 y 6 del Itinerario hay que destacar dos rasgos característicos: Uno de orden doctrinal, que es la desaparición del papel fundamental que atribuía en las obras anteriores a la primidad del ser de Dios y a su perfección suprema en la explicación del origen de las personas divinas y el recurso a la bondad suprema, resumiendo los dos aspectos: teológico (Evangdio "Deus caritas est") y filosófico ("Bo– num diffusivum sui" de Dionisio). El otro rasgo es de alcance práctico en la espiritualidad franciscana, harmonizándose con la vivencia del Dios Amor en Francisco, más amorosa y sapiencial que especulativa 14 • Y así llega Bérubé a la consideración del "ens primum" en las Colaciones sobre el Hexaémeron. Son estas conferencias teológicas el testamento intelec– tual y espiritual del Seráfico Doctor y la expresión última de su pensamiento sobre el camino que permite elevarse gradualmente a Dios a partir del mundo exterior, del mundo interior del alma y del mundo superior que son los nom– bres de Dios revelados en la Escritura. Son como un aggiornamento del Itine– rario a la luz de 17 años de gobierno de la Orden de Frailes Menores en lo más fuerte de su crisis de adaptación a las condiciones nuevas de la Iglesia y de la ciencia. Para componerlas S. Buenaventura repasa sus escritos anterio– res con una visión nueva de la vida. El optimismo exuberante de los años 40 ha dejado sitio a una visión más realista y a una conciencia aguda de los obstáculos. No escribe bajo el cielo de la Alverna, sino en París, frente a errores de filósofos y desviaciones teóricas y morales de los teólogqs. Bérubé hace ver las dificultades críticas de esta obr:;i trasmitida única– mente por reportadores y de la que tenemos dos ediciones relativamente diferenciadas 15 . En el punto que ahora interesa, e. d. la noción de Dios 14 Bérubé ejerce aquí una vez más su papel de historiador de contrastes: A pesar de la fuerte influencia de Dionisia en la teología trinitaria, en el capítulo 5 del Itinerarium triunfa Anselmo sobre Dionisia, para acabar triunfando Buenaventura sobre ambos (239). 15 La edición dentro de las Opera omnia de Quaracchi se designa normalmente con la letra "B". La edición de Delorme responde a la letra "A". (S. Bonaventurae, S.R.H Episc. Cardinalis, Collationes in IIexaemeron et Bonaventuriana quaedam selecta ad fidem codd. mss. edidit R.P. Ferdinandus Delorme O.FM. (Bibliotheca Franciscana Scholastica medii aevi, t. VIII), Ad Claras Aquas (Florentiae) 1934.