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372 GERMÁN ZAMORA 2. Bustillo y Villalpando: frenazo y forcejeo Mientras tanto, las demás circunscripciones capuchinas de la penín– sula representaban, con su actitud, el anverso del cuadro anterior. Sus superiores acusaron gozosos recibo del mandato del Consejo en la última quincena de noviembre y primera de diciembre de aquel año (1779). Respondían los de las provincias periféricas acatándolo con unanimidad y manifestando que harían lo posible porque se llevara a la práctica, previa información a los definidores y lectores. Particular– mente cooperativos se mostraban los superiores de Aragón y Andalucía. El P. José de Fuendetodos, vicario provincial de la primera, contestaba el 23 de noviembre que en ella se pondría en ejecución la carta orden, « providenciando se dé la Filosofía del dicho P. Villalpando en todos los sucesivos Cursos, principiándose a leer en el primero que se establezca». El provincial de Andalucía, Jerónimo de Almonaster, era aun más explícito, y revelaba cómo el autor estaba ya al habla con él sobre el asunto.« Luego que el P. fr. Francisco de Villalpando - decía - me escribió tenía un Curso completo de Filosofía, con arreglo y método al que deseaba dicho Supremo Consejo, y con el mismo de mi Revmo. P. General, me facilité un pliego de dicha obra, con la que tengo tanto honor, cuanto que, estando a mi uso, he tocado ya en la santa Visita que voy haciendo sigan los Lectores de Artes enseñando a sus discípulos por el mismo» 1. En cambio, Nicolás de Bustillo dio un paliado « Non possumus » por contestación, limitándose a acusar recibo de la carta orden y añadiendo: « Venero la Determinación de S. A., a que tengo que representar». Antes que él lo había hecho ya su víctima, para alejar los peligros que sobre el porvenir de su Curso filosófico se cernían en la tierra que lo vio nacer. Las semanas iniciales de noviembre fueron el momento crucial en que las posturas antitéticas - viejo y nuevo método de estudios - se lo jugaban cara a cara. Era la ocasión de poner por obra el decreto de Matute, declarando libro de texto filosófico en Castilla « para siempre» la obra de Villalpando 8 • El día 8 se equipaba de profesor y autores a los nuevos cursantes de filosofía. Villalpando esperaba que su libro fuera reconocido como texto. El provincial y su definitorio señalaron, por el contrario, una vez más, el del P. Dupasquier. « En estos mismos días - notificaba amargamente Villalpando al antípodas, pues, mientras a éstos sólo puede adscribirse el nombre del P. Fermoselle y tal vez el del P. Reinosa, es decir, el cuarto y primer definidor, en la facción opuesta militaban el provincial P. Bustillo, el segundo definidor P. Sieteiglesias y el tercero, P. Corlas, como igualmente el secretario P. Caudete y el cronista P. Ajofrín. 7 AHNC, leg. 5539, n. 34: respuesta positiva del provincial de Andalucía (23.11.79), f. 34; de Valencia (27.11.79), f. 43; de Aragón (23.11.79), f. 35; de Navarra (4.12.79); y de Cataluña (4.12.79), f. 56. • Puede verse el decreto del P. Inocencia de Matute en el Apéndice documental, III.

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