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2 inclinamos demasiado fácilmente por la adhesión a una determinada causa, la de los "buenos", naturalmente? Sin ir más lejos, el conflicto del Golfo Pérsico en el que estamos envueltos, para nosotros, cristianos y franciscanos, nos obliga a una retoma de conciencia del espíritu ecuménico como un valor esencial de la fe que profesamos (no hemos reflexionado mayormente sobre esto en la óptica franciscana) en la línea y el es– píritu de Francisco de Asís, tan genial e intuitivo también aquí. De lo que se trata es de recuperar el talante profético de Francisco en relación con algo que se plan– teará a la Iglesia -tan demorada en lo que se refiere al espíritu ecuménico con– ciliar- en los próximos años, como un desafío de urgencia. ¿cómo situarse den– tro del contexto de la nueva evangelización, frente a toda la problemática, no sólo religiosa, del mundo musulmán, tan exacerbada ahora? ¿No se ha dado en el pasado, a pesar de todo, una fecunda interacción cultural entre musulmanes y cristianos, con huellas perdurables en todos los campos? Para nosotros, franciscanos, ¿no sería ahora justamente el momento de releer y meditar, aplicándolo a la espinosa y golpeadora realidad actual, en la que el mundo musulmán se encuentra tan implicado, el capítulo XVI de la Primera Regla y los relatos de algunas Crónicas? Con una conciencia despierta, por cierto, y sin los recaudos y glosas atenuadoras con que acabamos aguándolo todo. Nuestros hermanos musulmanes, ¿no podrían también "evangelizarnos" a nosotros de alguna manera? Y, de todos modos, de lo que se trata es del testi– monio de vida: ''Vayan y confiesen que son cristianos". ¿No sería este el momento de "ir entre los sarracenos" de una manera distinta? En la reciente A samblea de los 25 años CEFEPAL-Chile nos hicimos también muchas preguntas, vistas la novedad, densidad y aceleración del tiempo en que estamos viviendo, y que el lector encontrará reflejadas en algunas colaboraciones de este número de "Cuadernos Franciscanos " y en "TAU-Comunicaciones". Pueden servir al menos como incentivo para una reflexión, en más de un aspecto nuevo, que será necesario hacer de aquí para adelante. Camilo E. Luquin