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do una vida para poco o para nada. El fruto de nuestro "ser" religioso y el fruto de nuestro tra– bajo, si se hacen visibles, son un incentivo que nos anima en gran manera. Se necesita buscar nuevas formas de vida que encamen la letra que tenemos recogida en los Consejos Plena– rios de la Orden y en nuestras Constituciones. PERENNIDAD DE RASGOS ESENCIALES Algunos sostienen que no existe un "caris– ma capuchino", porque los capuchinos no ha– cen más que recibir y ejercitar el "carisma franciscano". Pero yo creo que sí se da un ver– dadero carisma capuchino, aunque coligado a la riqueza y variedad de los dones y carismas de san Francisco. El carisma de la reforma franciscana de los capuchinos se manifiesta y se consolida mediante la convergencia de dos factores: La iniciativa personal y colectiva de los promotores, su opción por la vida ere– mítica de contemplación, de pobreza men– dicante, su disponibilidad a los ministe– rios de la predicación popular y de la asis– tencia a los necesitados. El reconocimiento jurídico de la Santa Se– de, el apoyo de la autoridad política y co– munal y el favor del pueblol. Palabras autorizadas Para Juan Pablo II, la identidad propia del capuchino consiste en "el primado de la vi– da evangélica fraterna, vivificada por una fuer– te experiencia contemplativa, vivida en radical pobreza, austeridad, sencillez, alegre peniten– cia y en la plena disponibilidad al servicio de todos los hombres"2. Los Consejos Plenarios de la Orden y las Constituciones también nos recuerdan que: "El Espíritu de oración y la promoción de la oración, sobre todo interior, en el pueblo de Dios, fue carisma peculiar de nuestra fraterni– dad capuchina ya desde los comienzos. Y la historia demuestra que ello fue siempre ger– men de genuina renovación" 3. "Estamos per– suadidos de que, siendo la pobreza carisma nuestro especial, no cabe auténtica y verdade– ra renovación si la pobreza, tanto individual como colectiva no es visible inmediatamente como manifestación de una realidad interior y tan explícita que no necesita de explicaciones ni da lugar a subterfugios" 4. "La aportación específica de la actividad misionera del capu– chino se concretiza mediante la coherencia personal y comunitaria con nuestro carisma de Hermanos y de Menores, que consiste en encamar existencialmente el Evangelio, reve– lando, con alegria y sencillez, el amor del Pa– dre hacia los hombres. Ser auténticos para ser creíbles" 5. "El Consejo plenario recomienda encarecidamente a todos los superiores el cul– tivo, por medios aptos, del espíritu de fraterni– dad, como elemento primario y esencial que es de nuestra vida franciscana" 6. "La penitencia como éxodo y conversión se refiere esencial– mente a la actitud interior, pero debe también encontrar su expresión en la vida exterior, en ese modo de ser que se llama 'austeridad' y que ciertamente es característica de nuestra identi– dad" 7. "La cercanía al pueblo caracteriza nuestra Orden. El proceso de renovación ha hecho crecer la conciencia y el deseo de recu– perar nuestra identidad y nuestra tradición también en este sector. Esto ha llevado a redes– cubrir el rico contenido de las formas tradicio– nales de presencia en el pueblo: misiones po– pulares, ministerio de la confesión... y a buscar nuevas formas significativas de inserción: mundo obrero, marginados, pequeñas frater– nidades... Un proceso en el que encontramos luces y sombras. Y ciertamente, todavía queda mucho camino por andar" 8. "En la vida y ac– tividad de los hermanos misioneros, san Fran– cisco ha querido subrayar, con su postura per– sonal y con sus palabras, un elemento carac– terístico de nuestra identidad de menores: la disponibilidad a la cruz, al martirio. He ahí el camino y el método de una auténtica evangeli– zación cristiana, como la de Jesús" 9. Estos textos nos señalan a la perfección dónde se encuentra hoy nuestra identidad. Nos exigen una respuesta que a veces no es fácil, pero es nuestro camino. Si salimos de él, estare– mos perdidos, desorientados o sin identidad. Características de toda reforma Cierto es que el tema de la identidad capu– china como novedad dentro de los movimien– tos reformistas franciscanos no está suficiente– mente estudiado. "Falta el estudio minucioso y comparativo que nos ofrezca datos ciertos y 225