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Contribución de la teología franciscana 719 las verdades de fe: cuáles son la condiciones de posibilidad apriori, transcendentales, existentes en el hombre en virtud de las cuales las propuestas básicas de la fe resultan dotadas de suficiente racionabi– lidad y adaptabilidad interna como para ser bien recibidas por el hombre a quien aquí y ahora se dirige el Mensaje. Manejando conceptos de la epistemología de Aristóteles, usuales en su tiempo, J. Duns Escoto propone la razón de Deidad, Dios en su más pura mismidad, Dios ut est haec essentia como el único objeto formal propio, virtual y dinámicamente omnipresente en cualquier enunciado quequiera proponerse como realmente teológico 19 • En otros momentos de su sistema teológico Duns Escoto puede ser con– siderado como pensador destacadamente cristocéntrico. Pero al seña– lar la razón última de la teologicidad de cualquier enunciado teológico propone que se llegue a la pura razón de Deidad: ninguna realidad o acontecimiento entra en la teo-logía sino se habla de él « sub ratione Deitatis » bajo la razón de Deidad. Desde Dios, en Dios y para Dios; según decía el texto citado de san Buenaventura 20 • 2. - Teocentrismo, cristocentrismo, antropocentrismo de la teología. Al lado de este intenso teocentrismo que hemos señalado en la TF no se debe desconocer el hecho de que esta misma corriente teológica ha sido calificada reiteradamente como representante de un marcado cristocentrismo. Más ostensible y universal a nivel de la vida espiritual, de la formae vitae, pero tambien de la correlativa forma mentís, o sistema teológico que sobre aquella se eleva. La orientación cristocéntrica es una constante en la historia de la teología cristiana. Ya Duns Escoto la tenía a la vista cuando insiste en la ratio Deitatis como objeto formal de la ciencia sagrada. San Buenaventura no dudó en mencionar a Cristo cuando le ocurr,e 19 Sobre Dios como objeto formal de la teología trata Escoto en Ordinatio, prol. p. 3, q. 1-3, nn. 124-207; I, 89-14-0. 'º La teología trata de todos los seres « en cuanto a la relación que tienen a la esencia divina como tal esencia ». Para Dios todo conocimiento es teológico; para nosotros el conocimiento de cualquier ser es teologico potencialmente, si lle– gamos a conocerlo sub ratione Deitatis. IB n. 206; I, 138. Así son conocer teoló– gico los sucesos de la liberación de Egipto narrados por Moisés como acciones de Dios, y no lo son cuando lo narra un cronista egipcio, IB n. 182; I, 122ss.

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