BCCCAP00000000000000000001532

MICHELE· FEDERICO SCIACCA Y ESPAÑA 423 Entre la rica variedad de temas que Zubiri aborda en su obra Sciacca selecciona sólo dos: la función de la vida intelectual y el sentido de religación de la existencia humana. Sobre el primer tema advierte en Zubiri una doble actitud: de oposición, por una parte, a la tendencia positivizante y niveladora del saber, que pone en peligro la función de la vida intelectual, y de vinculación, por otra parte, a la teoría clásica de la verdad, al definir ésta como posesión intelectual de la índole de las cosas. Esta doble actitud cristaliza en Zubiri en su concepción de la diferencia esencial que separa el saber científico del saber filosófico. Sciacca e~pone esta diferencia con la sulficiente claridad para poder ser entendido de quien ya conoce el pensamiento del filósofo español. Pero las breves páginas densas que le pudo dedicar en su obra, no ponen en claro la nítida distinción zubiriana entre el cómo se conexionan las cosas, objeto de la ciencia, y qué son las cosas, objeto de la reflexión filosófica. El otro tema de Zubi,ri que ha atraído la atención de Sciacca es el de la religación de la existencia humana. Es decir : el hecho de que el hombre se halle implantado en el ser y vinculado a las cosas para poderse realizar. Advierte Sciacca que para Zubiri vivir es vivir con los otros. Pero este con adquiere en el filósofo español un raigambre metafísico, pues entra como constitutivo de la persona. Ahora bien; si el hombre se halla implantado en el ser, tiene una vinculación primaria y fundamental con el Ser primero al que se halla religado. De esta 1·eligación con el Ser primero brota esa vivencia profunda y misteriosa que llamamos religión. De aquí que el hombre sea esencialmente religioso. No le viene la religión como aigo yuxtapuesto. Brota ella ontológicamente de su religación y aflora en actos religiosos por la aquiescencia de la voluntad a esta religación óntica. De aquí que pueda ser formulada una prueba de la existencia de Dio,s desde la vinculación metafísica del hombre. Pero no una demostración discursiva sino fundada en el análisis ontológico de una de nuestras dimensiones. Sciacca podía haber reflexionado sobre otros temas zubirianos, como el de la historia, el del ateísmo, ei de la deificación, etc. Pero las sugerencias que hace del pensador español son un excelente punto de partida para incitar a su estudio y orien– tar en el mismo. El pensamiento de Zubiri bien lo merece. De él afirma sin ninguna exageración Sciacca: "Forse il maggior filosofo, nel senso canonico del termine, che abbia oggi la Spagna" 36 • Interpretación filosófica de la España literaria En el campo de la literatura el genio español ha creado algunos tipos que han pasado a ser patrimonio de la cultura humana: Don Quijote y Sancho, Segis,mundo y Don Juan, los místicos, la picaresca, etc. M. F. Sdacca se ha acercado a casi todos, no de un modo detenido, pero sí lo suficiente para que su mente filosófica pudiera darnos nuevas perspectivas de nuestra rica producción literaria. Sobre las dos figuras inmortales, .Don Quijote y Sancho, ya dijimos que Sciacca había sido conquistado por el quijotismo de M. de Unamuno. Ahora resta tan sólo observar que en las páginas en las que hace al tema objeto de su propia reflexión hace notar que esta figura de caballero andante no es su caricatura sino su purifica– ción. El caballero manchego es un alma noble, iluminada, que cultiva una filosofía de s~ Filosofía oggi.. II, 434-44.0.