BCCCAP00000000000000000001531
EL CARISMA FRANCISCANO DE ASÍS 465 3. ACONSEJO, AMONESTO Y EXHORTO EN EL SEÑOR JESUCRISTO A MIS HERMANOS QUE, CUANDO VAN POR EL MUNDO, NO LITIGUEN NI CONTIENDAN DE PALABRA, NI JUZGUEN A OTROS; SINO SEAN APACIBLES, PACÍFICOS Y MESURADOS, MANSOS Y HUMILDES, HABLANDO A TODOS DECOROSAMENTE, COMO CONVIENE ... Y NO DEBEN CABALGAR SINO APREMIADOS POR UNA MANIFIESTA NECESIDAD O EN– FERMEDAD. EN TODA CASA EN QUE ENTREN DIGAN PRIMERO: «PAZ A ESTA CASA.» Y LES SERA PERMITIDO, SEGÚN EL SANTO EVANGELIO, COMER DE TODOS LOS MANJARES QUE SE LES SIRVEN. Con este fragmento comienza propiamente el modo concreto de realizar la Fraternidad: el seguimiento de Cristo. Las normas dadas hasta ahora podrían aplicarse a cualquier Orden, regular o monástica, no así las que siguen a continuación. La visión del Evangelio desde una óptica misional, propia de los Movimientos pauperísticos, hace que Francisco entienda también su proyecto evangélico como un «seguir la doctrina y las huellas de nuestro Señor Jesu– cristo» (1 R. 1, 1). La vida según el Evangelio no es una simple imitación de Cristo, sino su seguimiento; Cristo, camino y pastor,2° 2 peregrino y extran– jero,203 es el único medio de llegar al Padre. De este modo, el proyecto cristiano de vida adquiere tal dinamicidad que no puede estructurarse a partir de la imitación estática de las virtudes de Cristo, sino de su seguimiento itinerante. a) Comportarse como menores En realidad, aunque no se explicite en textos evangélicos, se trata de recordarles la actitud menor que deben adoptar en su «ir por el mundo», y que se concreta en las bienaventuranzas mateanas. 2114 La relativa similitud de la Fraternidad con los Movimientos pauperísticos-itinerantes hacía fácil el mime– tismo de la contestación y la crítica que caracterizaba a estos grupos. Por eso era necesario, para mantenerse en la coherencia de la opción menor que habían hecho, el recordar y poner en práctica la actitud de siervos disponibles al servicio del Rcino. 20 s 202 Ad 6, 1 s. Cf. L. lRIARTE, «Figuras bíblicas "privilegiadas" en el itinerario espiritual de san Francisco», Sel Fran 28 (1981) 128 s.; O. VAN AssELDONK, «San Juan Evangelista en los escritos de san Francisco», ibid. n. 24 (1979) 469. 203 Cf. C. Ch. BILLOT, «La "Marcha" según los Escritos de san Francisco», Sel Fran 12 (1975) 282 s. 204 Cf. T. MATURA, El radicalismo euangélico, Madrid 1980, 153. 205 Cf. M. A. LAVILLA, La imagen del siervo en el pensamiento de San Francisco de Asís, según sus Escritos, Valencia 1955.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz