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Pablo Cano Sanz Estudio histórico artístico PÁTINA. Junio 2016. Nº 19, pp. 45-63. ISSN: 1133-2972 60 Siglas ADS Archivo Diocesano de Salamanca ARABASF Archivo de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando (Madrid) BN Biblioteca Nacional de España CN Calcografía Nacional IPCE Instituto del Patrimonio Cultural de España OFMC Orden de los Franciscanos Menores Capuchinos Apéndice Documental Doc. 1 1713, septiembre, 29. Primera descripción de la escultura dedicada a san Félix de Cantalicio , partiendo de su visión por las calles de Madrid; nos parece una fuente sumamente importante para tener una idea de conjunto del citado bien cultural. Anónimo, 1719: libro IV, 262-263. Obra de « cuerpo entero y estatura perfecta […]. San Felix era de la más primorosa escultura, que se ha visto en estos tiempos: llevaba en la peana tres Angelitos, que con admirables y graciosos ademanes le echaban panecitos en las alforgas; y estos de tan peregrina hermosura, que era hechizo de los coraçones; y parecia que el Artífice avia tenido especialisima assistencia de Dios para sacar obra tan perfecta, assí en el Santo, como en los Ángeles. Pusieronse sobre el hombro izquierdo sus alforjas, insignia de su ejercicio de Limosnero, que practicó quarenta años en Roma, con tanta edificación, prodigios y milagros que aun hasta oy dura su memoria, como si viviera: eran de rica muserina, bordada de diferentes pajaros y flores de oro. Llevaba el capucho, pecho, cintura y cuerda quaxados de diamantes que formaban vistosos lazos, joyas y otra variedad primorosa y haxian unos reflexos y visos muy agradables. […] En medio de este admirable trono [a]parecía San Felix glorioso en la tierra: su postura en elevación, mirando al Cielo, puestas las manos; y con multitud de riquísimas joyas sobre la pobreza, y simplicidad del habito le hazia, reverberar grandemente, y se obstentaba tan venerable, tan devoto, y agraciado, que se robó los afectos en este plausible dia ». Doc. 2 1713, octubre, 8. Segunda descripción de la imagen de san Félix de Cantalicio, cuando fue instalado en la iglesia de San Antonio del Prado de Madrid, para celebrar los 21 días de fiesta con motivo de su canonización. Anónimo, 1719: libro IV, 270-271. « Adornaban este primoroso altar cinco arcos de diversos colores, y nubes, corriendo desde el primero en disminución hasta el último, haciendo las proyecturas de cada uno la perspectiva al centro. […]. En lo alto de los arcos, en el centro de en medio, estaba la bellísima efigie de San Félix, de riquísima talla, tan primorosa, quanto nunca se podrá ponderar bastantemente; y en la peana los Angélicos, echándole en unas alforgitas panecillos, todo tan agraciado, y hermoso, como ya se pintó, tratando de la Procesión; y sobre las alforjas, que tenía sobre su hombro, bordadas de finísimo oro, le pusieron muchas joyas de gran valor ».

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