BCCCAP00000000000000000001510

EL CARISMA DE FRANCISCO DE ASÍS 99 Orden en su asistencia, y el precepto de la Regla bulada prohibiendo su ingreso a los que no tuvieran una autorización especial de la Sede Apostólica. La relación de Francisco con Clara, aun antes de entrar en San Damián, es un dato tan evidente que no merece que nos detengamos en probarlo. 364 Incluso los contactos de la primitiva Fraternidad con las Damianitas, a pesar de llegarnos por una fuente tan sospechosa como las Florecillas, parece tener un sustrato histórico. 365 Lo cierto es que es un escrito enviado por Francisco a las Damas Pobres de San Damián, y que insertó Clara en su Regla, les dice: Ya que, por divina inspiración, os habéis hecho hijas y siervas del altísimo sumo Rey Padre celestial y os habéis desposado con el Espíritu Santo, eligiendo vivir según la perfección del santo Evangelio, quiero y prometo dispensaros siempre, por sí mismo y por medio de mis hermanos, y como a ellos, un amoroso cuidado y una especial solicitud (FVCl ls.). Indudablemente hay un compromiso contraído por Francisco, en nombre de toda la Orden, de cuidar de las monjas. Cuidados que se concretaban en un capellán con un compariero clérigo de buena fama y prudente discreción, y dos hermanos legos, aman/es de la santa conversación y honestidad, para ayuda de nuestra pobreza.'" 6 Lo que, al parecer, Francisco no estaba dispuesto a admitir era el cuidado de los otros monasterios que, al amparo de San Damián y favorecidos por el cardenal Hugolino, habían surgido. 367 Mientras Francisco se encontraba en Oriente había muerto el visitador cisterciense fray Ambrosio, cosa que aprovechó el cardenal Hugolino para solucionar el problema. Fray Felipe Longo se encargó de atender espiritual– mente estos monasterios, convirtiéndose así en el sucesor de fray Ambrosio. Jó.i Il processo di canonizzazione di S. Chiara, Volgarizzamento quattrocentesco umbro– italiano, publicato da Z. LAZZERI, en A.f.H. 13 (1920). 489. Escritos de Sta. Clara, p. 132 s. 36 '' Sobre los contactos de la primitiva Fraternidad con las Damianitas puede verse: Flor XV s.; Escritos de Sta. Clara, p. 353 ss.; Ch.A. LAINATI, «La cloture de sainte Claire et des premieres darisses dans la législation canonique et dans la practique,,, en Laurentianum 14 (1973) 241 s. La decisión de defender a ultranza la clausura de San Damián ya desde los inicios obliga a la autora a utilizar exclusivamente las fuentes internas más seguras de la Orden y los documentos curiales, olvidando testimonios externos como el de Jacobo de Vitry, que ponen un interrogante sobre el tema. Por otra parte, no es del todo serio negar el trasfondo histórico del relato Actus-Fioretti dicien– do que es una ampliación popular de algunos temas de la leyenda porque, como ella misma reprocha a H. RoGGEN, las afirmaciones tienen que probarse. Cf. C. GENNARO, «Chiara, Agnese e le prime consorelle: dalle "Pauperes dominae" di S. Damiano alle Clarisse», en Movimento religiosa femminile, p. 170 ss. ·166 Escritos de Sta. Clara, p. 274. 367 Cf. H. GRUNDMANN, Movimenti religiosi, p. 198; O. SC!!MUCKI, en Movimento relig¿~so femminilc, p. 45 s.; C. Gennaro, «Chiara, Agnese e le prime consorelle... », ibid., p. Ve,.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz