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382 JULIO MICÓ Por la misma razón que silenció anteriormente las funciones del Ministro general -su evidencia-, calla también aquí las del capítulo, aduciéndolo simplemente para urgir la elección del nuevo Ministro en caso de fallecimiento del anterior o de su incompetencia para el gobierno. 314 La reunión de hermanos -el Capítulo-, como celebración de la Fraterni– dad y preocupación común de la marcha de la misma, se confunde con sus orígenes. 315 Los tres Compañeros hablan de dos Capítulos anuales, en Pente– costés y San Miguel; pero al describir el modo de desarrollarse solamente aparece el de Pentecostés, en el cual se reunían todos los hermanos en la iglesia de Santa María de los Ángeles (TC 57) y trataban de cómo observar como mayor perfección la Regla, y destinaban hermanos a las diversas Provincias para que predica– ran al pueblo y para que, a su vez, colocaran a otros hermanos en sus provincias (TC 57). A todo esto sigue una serie de consejos prácticos que encajan perfectamen– te dentro de la mentalidad de Francisco, según aparece en sus Escritos. En 1216 Jacobo de Vitry nos dice cómo se desarrollaban los Capítulos: Los hombres de esta Religión, una vez al ario, y por cierto para gran provecho suyo, se reúnen en un lugar determinado para alegrarse en el Seii.or y comer juntos, y con el consejo de santos varones redactan y promulgan algunas santas constituciones, confir– madas por el señor papa. Después de esto, durante todo el año se dispersan por Lombardía, Toscana, la Pulla y Sicilia. 316 En su Historia del Oriente nos vuelve a decir, unos años después, que una o dos veces al afio se reúnen todos, en un tiempo y lugar determinados, con objeto de celebrar el Capítulo general; sólo dejan de acudir los que se halian en tierras muy alejadas o al otro lado del mar. Después del Capítulo, su superior los vuelve a enviar, en grupos de dos o más, a las distintas regiones, provincias y ciudades (BAC p. 966). La Regla de 1221 habla de tres Capítulos: Cada Ministro podrá reunirse con sus hermanos una vez por a1io, en la fiesta de San Miguel Arcángel, y donde mejor les parezca, para tratar de las cosas que se refieren a Dios. Y todos los Ministros, los de ultramar y los ultramontanos una vez cada tres años, y los demás una vez al mio, vendrán al Capítulo de Pentecostés junto a la iglesia de Santa María de la Porciúncula, a no ser que el Ministro y síervo de toda la Fraternidad haya determinado otra cosa (1 R 18). 314 Cf. J. GARRIDO, La forma de vida, p. 261. 315 Cf. M.A. NEUKIRCHEN, De capitulo generalí in primo Ordíne seraphíco, Romae 1952; K. EssER, La Orden Franciscana, pp. 115 ss.; G. MARCINI, «I Capitoli nella primitiva fraternita francescana: mediazione tra carisma e vita», en Forma Sororum 16 (1979), pp. 117-127. 316 S. Francisco de Asís. Escritos ... , p. 964; K. EssER, La Orden franciscana, pp. 118 s.