BCCCAP00000000000000000001508

292 FIDEL AIZPURÚA, OFMCAP fuerza en beneficio de un exclusivo y excluyente sector del mundo que es la llamada cultura occidental. 10 Eso contradice su sentido básico, porque una globalización para un solo sector del mundo es una contradicción. Veamos algunas nociones: •· La noción de <<desarrollo sostenible,>: No pocos pensadores actuales, desde sociólogos hasta antropólogos, han llegado a la conclusión de que la noción de desarrollo sostenible se hace justamente «insostenible» porque lo que se pre– tende es manejar los recursos de la tierra de manera que garanticen el alto nivel de vida al que nos ha llevado el desarrollo. Por eso, cuando decimos desarrollo sostenible en realidad estamos hablando de nuestro tren de vida. Esta noción está envenenada porque supone que dicho desarrollo sostenible no se puede mantener sin el requisito de que grandes sectores del mundo queden excluidos de él. La única manera de curar esta fenomenal intoxicación es administrarle dosis crecientes de solidaridad. 11 Efectivamente, este desarrollo insostenible se haría sostenible en la medida en que toda persona, de cualquier país, tuviera garantizado un desarrollo igualitario. Si no, hablando de este tema, excluirnos e injuriamos a los/ as pobres.11 * La noción de «derechos humanos»: Si hoy algo parece ser una noc10n global es ésta de los derechos humanos. Pero la cruda realidad es que, provi– niendo de un pensamiento occidental, los derechos humanos son sistemá– ticamente conculcados sobre todo en los países pobres del mundo, quienes no gravitan en la órbita de la cultura occidental. Mientras los derechos humanos sean patrimonio solamente de una parte de la humanidad será una noción envenenada de los mismos la que estaremos manejando.U Y, por supuesto, w Se produce aquí el mismo fenómeno en relación con el dinero: siendo bueno «en sí mismo» (?) se emplea en modos injustos por causa del uso exclusivo del mismo. Por eso el Evangelio no ha dudado en clasificarlo como ,,dinero injusto»: Le 16,9.11. l1 Cf. J. R1ECHMANi'i, ,,Hacia un desarrollo sostenible v solidario», en El cristianismo ante el siglo xx1, una mirada 1111eva. XIX Congreso de TeologÚ1, Madrid 2000, pp. 17-38. 12 ¿Cómo va a ser sostenible un desarrollo simbolizado en multinacionales perte– necientes todas a países occidentales que, cualquiera de ellas, tiene más presupuesto que países enteros, incluso desarrollados? Según L.G. CARVAJAL, op. cit., p. 32, multina– cionales como la General Motors tienen un volumen de ventas (168'8 millones de dólares en 1996) superior al PIB de Turquía (149'8 millones). u «Los derechos humanos se caracterizan por su ambigüedad.. Deberían hacer avanzar la causa de los pobres. Pero defienden a los poderosos y no a los marginados. El egoísmo y la institucionalización pueden invertir ideales y hacer que apoyen aque– llo contra lo que luchaban»: f. W1LFRED, «¿Derechos humanos o derechos de los po– bres?», en Selecciones de Teología, 154 (junio 2000) 15-34.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz