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4 J. MICÓ des, es la matriz no sólo de la pobreza de Francisco sino de toda su espiritualidad. Este Jesús, que se hace pobre por nosotros y desde su menesterosidad humana permanece siempre abierto a su Padre, es el que marcará el itinerario de pobreza de Francisco al colocarse delan– te del camino e invitarle a que le siga. I. LA POBREZA EN LA EDAD MEDIA Nuestro concepto de pobreza está mediatizado por la visión economicista que tenemos de la vida. Y no es que la economía deje de tener importancia a la hora de producir pobres o de influir en la idea que nos hagamos sobre la pobreza; pero no debe ser tan determinante que oscurezca las otras facetas, también importantes, que configuran su identidad. La comprensión de la pobreza, por tanto, tiene que ser amplia. El pobre medieval, según Mollat, es aquel que, de manera permanente o temporal, se encuentra en una situación de debilidad, de dependencia, de humillación, caracterizada por estar privado de los medios, variables según las épocas y las sociedades, de potencia y de consideración social: dinero, relaciones, influencia, poder, ciencia, calificación técnica, honorabilidad del nacimiento, vigor físico, capacidad intelectual, libertad y dignidad personal. Vive al día y necesita de la ayuda de los demás para liberarse de la pobreza. Esta descripción tan amplia de la pobreza tiene la ventaja de abarcar a todos los frustrados, los abandonados, los asociales, los marginados, y a los que, por una opción reli 6riosa, optaron por abandonar el mundo o por vivir pobres entre los pobres. Sin embargo, requiere el _complemento de una posterior matización, donde la pobreza se describa en su espacio y tiempo determinados, para descubrir el sentido social y religioso del pobre en concreto, sin cuya referencia difícilmente se puede entender la pobreza de Francisco. l. UNA SOCIEDAD DE POBRES El pobre de la alta Edad Media, aunque haya superado el esclavismo de la época romana, conserva todavía su dependencia respecto a los poderosos. Desde el siglo vi al xr, el escenario donde se debaten las confrontaciones entre ricos y pobres es el campo. Era rico el que poseía tierras y alimentos, no el que tenía dinero. La pobreza estaba, pues, delimitada por la ausencia de tierras y 1a dependencia alimentaria. Aunque en todos estos siglos el telón de fondo sigue siendo el mismo -el mundo rural-, sin embargo, los problemas sociales sí que sufren un cambio entre las épocas merovingia y carolingia. Para el pobre merovingio, la cuestión fundamental era la de sobrevivir, mientras que, en el siglo 1x, el pobre es el que no tiene un lugar dentro de la sociedad. Aplastado en el primer caso, el pobre no está sino oprimido en el segundo, es decir, la pobreza ya no se encuentra en 1a ausencia del tener, sino en la carencia del ser.

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