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EXPERIENCIAS MISIONALES EN ESPAÑA 265 con el repetido caso de los esclavos negros, que llegaban a las misiones en el siglo XVII para liberarse de la esclavitud de sus dueños. Se trata de un precedente precioso que debe ser tenido en cuenta. c) A la luz de estas actitudes regias debe explicarse el conocido hecho de– los indios americanos traídos por Colón después del segundo viaje y·que fueron regalados o vendidos a diversas personas; posteriormente fueron recuperados por la Reina y fueron devueltos, los que sobrevivieron, a las Antillas 9 • d) Conviene también no olvidar que en las Capitulaciones de los Reyes Ca– tólicos con Boabdil el Chico quedó bien definida la libertad de los moros de la capital de Granada y de sus términos: Ellos nunca perderían su li– bertad; debían reconocer a sus nuevos soberanos y la Corona les presta– ría seguro, amparo y defensa. Les respetarían la religión, su organización social y los derechos personales a emigrar y cambiar de residencia. Aun– que no llegaron a la condición de los mudéjares castellanos, les conce– dieron una situación especial y de privilegio, tanto que moros de otras comarcas quisieron hacerse pasar por habitantes de la capital para gozar de tal situación, e incluso quisieron comprarla 1 º. Al hilo de esta situación granadina se piensa sin violencia en el esta– do de libertad del indio americano; al menos en el terreno de los princi– pios, ya que no se podrá olvidar que hubo encomenderos que en teoría admitían la libertad del indio, pero en la práctica y de hecho lo sometían a dura esclavitud. La cadena de testimonios no sufre corte, desde los pri– meros misioneros del siglo XVI hasta los misioneros capuchinos anties– clavistas del siglo xvn, que hemos recordado en otro estudio del pre– sente congreso 11 • 1.3 Intervención de los naturales en las instituciones Los Reyes Católicos buscaron colaboradores moros para implantar y sostener la nueva administración de los conquistadores. El primer ayunta- 9. V. RODRÍGUEZ VALENCIA, Isabel la Católica y la libertad de los indios de Améri– ca, en AntholAnnua 24-25 (1977-78, pp. 645-680). En este estudio valioso se rehacen los pre– cedentes canarios y las gestiones de la Reina para devolver a los indios americanos. Queda sin verificación la posible consulta a teólogos y canonistas sobre la cuestión. 10. Véase el estudio insuperado de M. GARRIDO ARIENZA, Las capitulaciones para la entrega de Granada, Granada, 1910. Reciente y puesto al día, M. A. LADERO QUESA– DA, Castilla y la conquista del reino de Granada, Valladolid, 1067. 11. Nos referimos al célebre P. José Francisco de Jaca, que con su compañero P. Epifanio de Moirans se convirtió en campeón de la libertad de los esclavos negros; ahora bien, existen cartas del mismo al Rey denunciando la esclavitud de hecho soportada por los indios. Sobre ellos tratamos en nuestro estudio para este congreso en La misión de Maracaibo.

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