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68 REFLEJOS.-FR. BASILIO DE PINILLA des cieux nouveaux et une terre nouvelle en recueilleront les fruits» (31). · Hemos tratado de concretar el punto de vista que adquiere nues– tro trabajo de colaboración en la nueva Economía: somos los cola– boradores de la creaci6n a través de la obra de Cristo. El mun– do ha de ser asociado, mediante nuestro trabajo cristiano, al hecho fundamental de la Encarnación. Es una necesidad. Con frase gráfica lo escribía Berdiaev: «hay que anclar el universo entero, y no sólo el destino del hombre, en Cristo. Es también el lema, que en gradación temporal flechan las palabras del Apóstol, «todo es vuestro, vosotros de Cristo y Cristo de Dios> (32). La última etapa tendrá lugar «cuan– do el mismo Hijo se someta a Aquel que le sometió todas las cosas para que Dios sea todo en todas las cosas» (33). CONCLUSION No reviste nuestro trabajo un carácter exclusivo. Ha sido nues– tro intento hacer resaltar el sentido teológico de colaboración que importa, respecto de la creación desde un principio, y actualmente también respetto de la Redención, bastante conforme, por lo demás, con la dignidad de nuestra naturaleza y su aparición en la historia del hombre. Con esto queda ampliado el radio de nuestra actividad, orienta– da por un ideal más elevado, cuyas resonancias repercutirán aún notablemente en el aspecto económico, cumpliéndose así lo que ya Montesquieu notaba acerca del Cristianismo: «esta Religión que no cree ocuparse más que los intereses de la otra vida, es t&mbién quien con más éxito salvaguarda los de ésta». Nuestro trabajo, englobado en el sentido de la activ:idad huma– na, se orienta directamente hacia Dios; es un medio de revelación y para el hombre un camino real que conduce al seno de Dio¡. 31.-MoUROUX 1 J., o. c., p. 23. 32.-1. Cor., 3, 22. 33.-1. Cor., 15, 28. Jr:,u¡ /$,asi/io, Je /Ji11,illa