BCCCAP00000000000000000001466

CAPUCHINOS PRECURSORES DEL P. BART. BARBERIS 373 orden a un acto que puede producirse por las ;fuerzas naturales, en este caso la potencia es « simpliciter absolitta »; si, por el con– trario, esta potencia pasiva dice orden a un acto que sólo puede producirse por la potencia divina, en tal caso la potencia no es absoluta, sino « 8ec,undum quid)), potencia obediencia!, sobrenatural. Tenemos aqui una potencia pasiva con doble respeto; a un acto que puede ser producido por las fuerzas naturales, o a un acto, que sólo puede ser producido por la potencia divina. J'i o existe, por tanto, en el fondo una diferen– cia substancial eritre la opinión del Doctor Seráfico y del Doctor Mariano. Con todo, Gaudencio se esfuerza en negar la sobrena– turalidad en el sentido escotista y en establecer después una grande diferencia entre el Seráfico y el Sutil, para concluir, por fin, que el sentir de S. Buenaventura es conforme con el de S. TomáR y los tomistas que no admiten la distinción entre la capacidad del sujeto y la exigencia de la naturaleza. Escoto admite que los ángeles, en (pl estado de viadores, en ·virtud de una peculiar especie impresa, tenían conocimiento quiditativo de Dios, pero no intuitivo en el sentido propio, « eo modo quo (licitur intueri rem sicut est in se » sino abstractivo (1). No se diferencia mucho esta opinión de la que enseña S. Bue– naventura (2). Por su parte Gaudencio niega rotundamente la tal especie y pone a S. Buenaventura de parte de S. Tomás. Pero, aunque la mentalidad de Gaudencio no se sienta atraída hacia Ia,s enseñanzas de Escoto, con todo, tiene hacia él aquel respeto que se debe a los doctores clásicos, entre los cuales resplandece el Doctor Sutíl (3), y toma su defensa contra las infundadas y (1) Non vidctur ncgandum quin possit (angclus) uatnralitcr (distiuguendo contra mere supernaturales, scilicet gratiam et gloriam) habere cognitionem ejns (Dei) ahstraetivam, hoc modo intelligendo, quod species aliqna distincte repraesentet üitam essentiam (divinam), licet non repraesentet eam ut in se praescntialitcr existentem. Igitur nec videtur tafü, species ucganda ah intel– lectu perfectissimo c:i:cato. Nihil euim videtur debere negari ab intellectu summo creato, quod non repugnat alicui intellectui creato in uatnralilms, quia non est perfectio excellens nimis ». ScoTus, Oxon., l. II, d. 3, q. 9. (2) « Unde nec videbat (angelus) sub velamine aenigmatis, nec tamen faeie ad faciem, quia medium est inter utrumque, videlicet Deum videre in speculo absqne aenigmate "· S. BONAVENTURA, II Sent., a. 3, p. 2, q. 2, ad ií nm; t. II, l'· 123-124. (3) « Quia mihi semper alta mente repositum fuit, viros catholiem,, ma– xime vero doctores classicos, ínter quos emicat Scotus, a propositionibus in fide maculosis intemeratos ostendere ». GAUDENTIUS, op. cit., t. I, tract. 1, d. 11, q. 10, p. 114.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz