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118 S. ARA interpretación de San Francisco había sido hecha de forma competente, pero peligrosamente halagadora para las tendencias marxistas. El Padre José Luis Muñoz, T.C. leyó una comunicación titulada «Un franciscanismo de ayer para nuestro tiempo: situación de búsqueda». SESIÓN DE CLAUSURA Previamente a la misa de clausura del Congreso que fue concelebrada y presidida por el Padre Tomás Larrafiaga, OFM, provincial de Cantabria y presidente de la Conferencia de Menores a quienes correspondía por turno presidir las sesiones del Congreso, se celebró una mesa redonda en la que se dialogaron largamente tres cuestiones que recogemos seguida– mente. Puso fin al Congreso el Padre Manuel Blanco, OFM, presidente de la Comisión permanente de Congresos franciscanos. 1. Caminos para hacer llegar a los diversos campos de la cultura ac– tual (universitario, juvenil, clase media, n1ral, etc.) los valores del espí– ritu de San Francisco y de la espiritualidad franciscana. 2. Cómo continuar la renovación de la vida franciscana hoy (¿Pequeñas comunidades?, ¿opción exclusiva por los pobres?... ). 3. Posibles temas para el próximo Congreso, a celebrar en 1978. Respecto a la primera cuestión se sugirió que la Comisión permanente de Congresos franciscanos hiciera llegar a los Superiores provinciales, a quienes representa la inquietud de los congresistas porque se vea el modo de que algunos de los hermanos responsables de las revistas científicas que la Familia publica en España juntamente con los directores del Cen– tro de Franciscanismo, radicado, en Madrid, estudien la forma de res– ponsabilizarse de la edición y difusión del espíritu franciscano entre los círculos universitarios, asociaciones juveniles, clases obreras y otros gru– pos de la sociedad. Y como medio práctico de atender a la juventud se pidió la programación y potenciamiento de los movimientos juveniles. En cuanto a la segunda cuestión, se dijo que para continuar la renova– ción de la vida franciscana, es necesario tener un mejor y más profundo conocimiento del ideal franciscano, hacer un trabajo y servicio más desin– teresados, incluso en tierras de misiones, cultivar el espíritu de alegría, esforzarse por estimar debidamente a los Hermanos y Hermanas dedica– dos a la vida de contemplación y meditar seria y concienzudamente los escritos del Seráfico Padre. Como posibles temas para el próximo Congreso se indicaron: la Fami– lia franciscana antes y después del Vaticano II; la evangelización fran– ciscana en los medios de comunicación social: televisión, radio, prensa; los temas de los próximos sínodos desde una perspectiva franciscana. ANÁLISIS DEL CO,'iGRESO Es necesario destacar, en primer lugar, que bastantes de los partici– pantes no aceptaron el planteamiento y funcionamiento del Congreso. Y una de las preguntas que corrieron entre pasillos y que se hizo después públicamente en la sesión de clausura fue la de si el Congreso tenía ca– rácter científico o de reflexión y convivencia. La autocrítica respecto a la intervencl.ón de las autoridades civiles, el

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