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ART1CULOS El concepto ético cristiano del mundo, según San Juan Todo el aue ha nacido de Dios vence al mundo; y ésta es la victoria eme ha vencido al mundo: nuestra fe. (1, lo 5,4). I EL PROBLEMA CONSIDERADO EN SI MISMO Se ha escrito mucho, y es una ve:rdad que se defiende corrientemen– k, sobre la ;;ctitud positiva, llena de comprensión y :-evalorizadora de Cristo y su doctrina ante el mundo. Sobre todo, desde un punto de vis– ta personal, ético, se hace hincapié en el amor eficaz, vivo de Cristo a Lis hombres y los valores todos de su vida 1 • Por otro lado, es un he– cho histórico, que se revela singularmente en gran parte de la literatu– ra y hagiografía cristianas, el reconocido "desprec11) de tocias la:s en– ~,as del mundo" que han prni'csado en la práctica no pocos de !os más perfectos. Atil~ndasc qw! este es un hecho eminentemente "cristiano". He aquí, pues, a grandes rasgos, el problema. Sin temor a ser prolijos, puntualicemos ele modo más concreto ía cuestión, compleja y Jara de suyo, pues' se entraña en la misma raiz cris– tiana de todo el Nuevo Testamento, procurando, sin embargo, salvaí el carácter de brevedad y dntesis que pide toda introducción. San Juan 1rsumc afd, prácticamente, su concepción ética cristiarn uel mundo: "No ameis al mundo ni las cosas que hay en el mundo. Si alguno -aínare al mundo, no está en él la caridad del Padre; pues lodo !o que hay en el mundo -la concupiscencia de la carne, y la concupis– cencia de los ojos y la jactancia de los bienes terrenos-- no procede del Padre, sino que procede del mundo" 2 • "El mundo toqo estriba en el malo", causa del pecado, as decir, está puest'o en maldad 3 • Y conste, 1, Cfr. K~RL AnAM, Cristo, nuestro hermano, trad. de Antoni<> Sancho (Friburgo de Bris- govia, 1940) 1-13. · · 2. ! lo 2, f5-16. 3. I lo 5, 19. EaTUD1oa f'11AIICISCARO!I 53 091:i2) 161-19@.

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