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E L MUNDO, SEGÓN SAN j U A N su Hijo en el mundo: dar testimonio de Cristo ant, los homhes 1m:– diante los milagros y prodigios m y manifestar así, al propio tiempo, !a gloría de Dios a fin de moverlos a creer ,n '. Cristo mismo, i;cgún e.~– to, provoca expresamente algunos milagros cc,n la abierta rntenciú11 apologética de despertar la fe en El en los que k conozcan rn,. l:n cambio, esos mismos prodigios por ejemplo, que p:ira unos eran luz, rara otros eran motivo de entenebrecimiento mayr,r, dada '.'nt obccc.1- ciém y endurecimiento voluntarios, pccarrrinosos rn:> que les ncasirmah,, una enorme dificultad en creer "rn. El hecho c.,;tá eoi,signado r,n•cis.'.1- mcnte por San Juan. "A pesar de ,tan grandes maravillas obradas en presencia (ie ellos, todavía no creían en El" rn,_ Oros motivos extrínsecos de fe o incredultcl,,d e~ Jesús qu~· señala San Juan tienen un matiz más circunstancial, c,)mo por ejemplo, ,,¡ ori-– grn humano ele Jesús y la Pasión que escandalizaba a los judíos se– gún el coneepto de Mesías que poseían rn". Sin ernbargu, si bien esto, p1<>blemas ü motivos de incredulidad cambian en los cliverso.3 tiemp,rn, la persona ele Jesús, de un modo u otro, será siempre p 1 i,edra de •.:s– cúndalo y tropiezo, raíz de escisión entre unos hombres y atncción de otros. Motivo, en una palabra del existir de los dos reinos, el de Dio', y el del mundo. b) Intrínsecas: En general tales causa~ de fe cnstiana ·i abierta \11credulidad suelen ser de validez más universal y, generalmente, pnr In que respecta a las que consigna San Juan, más bien motivos de in– credulidad que de f.e. He aquí el esquema gener,d de las mismc1s: 1) Realidades ónticas diversas: "Vosotros sois de aquí abajo, yo no soy de este mundo" rn,. Los hombres alejados de Cristo, mundanos, puesto que son aún hijos del diablo --que es padre de la mentira-- no están en disposición de recoi:iocer y aceptar el habla, las palabras de Jesús, que dice la verdad, que es la misma verdad 1 " 7 • O, en otros tér– minos, porque no son ele sus ovejas no oyen su voz 168 • Esto, claro es- 159. lo 5,36-37. 160. lo 11,4.14-15.40. 161. lo 11,41-42. 16'2. Jo 15,2'2 25; 16,9. 163. Cf. SÁ1Nz 8.1,, o. c., 23-26; UGARTI! DE ERCILLA S.!., Los milagros del Evangelio (Madrid, 1914) 78-79. 164. lo 1237ss; 9, 16.28 ss. 1146-49; 1210-11.19. 165. lo 7,41-43.27-29,52; 9,29; 814; 12,34. 166, lo 8.23; 6,15. 167. lo 8,43-46. 168. lo 10,14.llti-27.
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