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LA IGLESIA CATÓLICA Y EL MUNDO DE LA FAMILIA pecto de los padres. Y, en tercer lugar, el amor y la autoridad paternos b) El salario familiar relativo tiene en cuenta la situación efectiva de la familia. Este salario relativo se compone de dos partes: una parte 1 _;s el salario básico, que se fija por el rendimiento, y otra parte, la que con– sidera la situación familiar y se fija en porcentajes fijos sobre el salario base. Este plus familiar no es retribuido por la empresa, sino por la so– ciedad para quien las familias numerosas son una garantía de regenera– ción y de subsistencia. En efecto, la mayor esperanza de vida supone que la clase inactiva aumentará numéricamente y que sus ahorros actuales no bastarían para sufragar los gastos del seguro social. Las familias nume– rosas, que aportaron una mayor porción de la renta nacional futura, se encontrarían en una injusta situación de inferioridad de no estar compen– sadas estas diferencias de salario. e) Las compensaciones o subsidios familiares son igualmente una exi– gencia de Derecho natural. La justicia distributiva exige una repartición equitativa de la renta nacional según la contribución presente y futura. Los métodos de compensación familiar son diversos y abarcan medidas de ca– rácter fiscal, con exenciones proporcionales al número de hijos, o las apor– taciones monetarias a través de cajas de compensación. La exención fiscal debe tener en cuenta los gastos de vivienda, educación de los hijos y otros bienes de consumo inmediato. Donde no llegue la política fiscal debe .acudirse a los subsidios familiares. Las dos modalidades principales son las cajas de compensación o los subsidios etatales. La primera modalidad tiene la ventaja de ajustar los fondos y la distribución de los mismos al proceso productivo, ya que las aportaciones de las cajas de compensación proceden de los empresarios. La segunda modalidad evita laa fluctuacio– nes en la distribución, pero abre amplio margen a la intromisión del Es– tado en el ámbito familiar y debe considerarse como una «solución obli– gad~». Entre otras medidas accesorias de política familiar conviene men– cion'.u-, la concesión de préstamos matrimoniales con remisión parcial y {~scalonada, según el número de hijos, los subsidios de maternidad, la asis– tencia gratuita en la clínica de maternidad, asistencia doméstica a las par– turientas, descuentos de viajes en empresas estatales o municipales, resi– dencias infantiles veraniegas y residencias para vacaciones (24). d) El sustentamiento familiar no solamente es una exigencia de jus– ticia, sino también de caridad. La beneficiencia por medio de instituciones estatales o caritativas, como las Conferencias ele San Vicente Paúl o la Cá– ritas, deben atender a las necesidades de las familias numerosas, sobre todo con la asistencia moral y religiosa. Todas estas ayudas tiene un ca- 1109