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140 L. IRIARTE NUEVO EVANGELISTA Expresión notable en la Vida I de Celano: «Porque el nuevo evangelista de los últimos tiempos, como uno de los ríos del paraíso, inundó el mundo entero con las aguas vivas del Evangelio... » (1 Cel 89). NUEVO SAN PABLO Era normal que los biógrafos encontraran cierta similitud entre la conversión de Saulo y la de Francisco, especialmente en la pregunta: «Señor, ¿qué quieres que haga?» (TC 6; 2 Cel 6; LM 1, 3). FIGURAS BÍBLICAS REFERENTES A LA ÜRDEN No era frecuente en la Edad Media ver en la Iglesia el «nuevo Israel de Dios». Pero en la literatura franciscana se hizo normal presentar a la Orden de hermanos menores como el «pueblo nuevo» y el «nuevo Israel». Ya fray Elías, al anunciar la muerie de Francisco, hablaba de éste como de un nuevo Moisés, «que enseñó el camino de la vida y de la obediencia a Jacob, y propició un testamento de paz para Israel, preparando en todo el mundo un pueblo nuevo para el Señor». La misma idea de la fraternidad reunida por Francisco como «un pueblo numeroso», «que reúne a los hijos dispersos de Israel», aparece en la Vida I de Celano (1 Cel 28, 30, 39). San Buenaventura desarrolló este mismo pensamiento (LM 3, 7; 4, 4). Tanto en el Sacrum Commerciuni como en la Leyenda de Perusa y des– pués en los escritos de los espirituales, el concepto del pueblo nuevo no se refiere tanto al antiguo Israel cuanto a las Ordenes religiosas que surgieron antes en la Iglesia. Los hermanos menores son «la estirpe que el Señor ha bendecido y elegido con amor sincero» (Is 61, 9; SC 14). Y se le atribuyen a Francisco estas palabras: «La religión y vida de los her– manos menores es un pequeño rebaño que el Hijo de Dios pidió en estos últimos tiempos a su Padre celestial, diciéndole: "Padre, yo quisiera que suscitaras y me dieras un pueblo nuevo y humilde que en esta hora se distinga por su humildad y su pobreza de todos los que le han precedido y que se contente con poseerme a mí solo." El Padre dijo a su Hijo amado: "Hijo, lo que pides queda cumplido."» (LP 101; EP 2, 71a; Cla– reno: Trib. II, 1, 8). Junto a esta concepción aparece también la del pacto o alianza, especial– mente en el Sacrwn Commercium. A las imágenes del Antiguo Testamento pertenece la visión, atribuida a Francisco, sobre el futuro de la Orden, muy explotada por los espiri– tuales. En la Vida II de Celano es una sefwra con cabeza de oro, pecho y brazos de plata, vientre de cristal y las extremidades inferiores de hierro, cubierta con un manto sórdido (2 Cel 82). En Ubertino de Casale y en Angel Clareno se trata de un ángel, con la cabeza de oro, el pecho y los brazos de plata, el vientre de bronce, las piernas de hierro, los pies