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REFLEXIONES SOBRE EL TESTAMENTO 27 a los laicos que saben leer que dispongan del salterio (1 R 3, 8); a no ser que los términos «clérigo» y «laico» tengan un sentido puramente cultural y no canónigo. 13 Las iglesias eran el lugar de retiro donde pasar las noches. La Leyenda de los Tres Compañeros nos presenta a los primeros frailes, cuando todavía aparecían como sospechosos ante la gente, refugiándose en los pórticos de las iglesias, si no encontraban un albergue mejor (TC 38). La falta de pórticos en las iglesias de clima más frío, como en Alemania, llevaron a los amanuenses de una familia de manuscritos a añadirle al término «igle– sias» del original del Testamento (v. 18) los calificativos de «pobres y abandonadas», con el fin de explicar la posibilidad de refugiarse los frailes. Otros estudiosos entienden esta permanencia en las iglesias como un servicio temporal a disposición de los párrocos. Los Tres Compañeros apoyan esta opinión al decir que los frailes, a la hora de hospedarse, preferían hacerlo en casa de los sacerdotes (TC 59). El fragmento concluye con el reconocimiento de su «idiotez y sumi– sión». Incultura o incultura no tanto real, puesto que entre los primeros frailes había algunos cultos, cuanto de opción. El sentido sería el de no querer ser considerados como letrados, lo cual significaba una renuncia a su condición social y no una afirmación de incultura real. También es posible que Francisco evoque un pasaje de la 1 Regla, donde dice que en las casas donde sirven no tengan oficios que impliquen poder, sino que sean menores y al servicio de todos (1 R 7, 1). En resumen, podríamos decir que la actitud propia de la Fraternidad es de senciUez y servicio; de ahí que no se caracterice por el estudio, sino por el trabajo manual. 5. Y yo trabajaba con mis manos, y quiero trabajar; y quiero firmemente que todos los otros hermanos trabajen en ofi– cios honestos. Los que no saben, que aprendan, no por la codicia de recibir la paga del trabajo, sino para dar ejem– plo y evitar la ociosidad. Y cuando no nos den la paga del trabajo, recurramos a la mesa del Señor, pidiendo limosna de puerta en puerta (Test 20-22). En este fragmento sobre el trabajo manual se percibe claramente la intención de Francisco en el Testamento de utilizar, como correctivo de la situación de la Orden, la vida de los primeros hermanos, aun por encima, al menos de forma implícita, de la misma Regla. La ocupación de los primeros frailes, que habiendo renunciado a su posición social se declaraban sencillos y obedientes a todos, era de tipo manual. Celano, en la Vida /, al describir la epopeya de la Fraternidad 13 Cf. O. SCHMUCKI: La oración litúrgica según el ejemplo y la enseñanza de S. Francisco, en Sel Fran núm. 24 (1979) 485-496. K. EssER-E. GRAU: Orar en comunión con la Iglesia, en Sel Fran núm. 7 (1974) 57-62.

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