BCCCAP00000000000000000001430

112 Jaime Rey Escapa tran reminiscencias apologéticas de las viejas escuelas, se tiende a buscar pun– tos de encuentro a la hora de solucionar el problema. Por otra parte, la interpretación de los especialistas acerca del auténtico pensamiento de Escoto en relación a la cuestión del voluntarismo, si bien tiende a unificarse, no es to– davía unánime 14 . Una vez más, no podemos perder de vista el contexto de la Edad Media si no queremos desfigurar el problema. Para valorar correctamente el pensa– miento escotista es necesario una compresión correcta de este tema. Escoto, partiendo de la realidad concreta, se muestra siempre preocupado por salvar la libertad, sea de Dios sea del hombre, libertad que estaba amenazada por las corrientes de la filosofía árabe, que inspiradas en Aristóteles, influían fuerte– mente en el pensamiento de autores tan notables como Santo Tomás y Enrique de Gante, quienes aún hoy condicionan el panorama teológico-filosófico ac– tual, especialmente dentro del mundo católico. Hemos visto cómo en el hombre hay dos facultades irreductibles: la inteli– gencia y la voluntad. La inteligencia es la facultad del conocimiento que nos permite ver y valorar la realidad; la voluntad es la facultad a la que pertene– cen el apetito y la capacidad de elección. Es claro que la inteligencia tiene una prioridad temporal con respecto a la voluntad: Nihil volitum quin praecogni– tum. Lo que no parece tan claro es cuál de las facultades tiene la prioridad en el orden causal, es decir, quién determina a quién en el acto electivo conscien– te. A lo largo de la historia respondieron al problema dos escuelas con marca– das diferencias: una de ellas, la intelectualista, tomando como base el pensa– miento aristotélico da prioridad a la inteligencia. La otra, voluntarista, se en– marca en la corriente agustiniana, y se inclina por la voluntad. En la filosofía actual se evitan las posturas extremas; sin embargo, me parece interesante que nos adentremos en la cuestión 15 . Según Santo Tomás, uno de los representantes más significativos de la es– cuela intelectualista, dentro de las facultades racionales da la supremacía a la 14 Cf. ID., In via Scoti: la vía «libertatis», en Via Scoti. Methodologica ad mentem Joannis Duns Scoti. Atti del Congresso Scotistico Internationale, Roma 9-11 marzo 1993, I, a cura di L. S1LEO, Ro– mae 1995, 245-260. 15 Cf. J. M. MERINO, Historia de la filosofía franciscana, Madrid 1993, 260-263; L. D. ROBERTS, A Comparison ofDuns Scotus and Thomas Aquinas 011 Human Freedom of Choice, en Homo et mun– dus. Acta Quinti Congressus Scotistici Internationalis, Salamanticae 21-26 sept. 1981, edidit C. BÉRU– BÉ, Romae 1984, 265-272.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz