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48 José Ángel Echeverría Tanto entusiasmo parece que no sería sólo retórica hueca, aunque la exageración podía ser también fruto de un estudiado cálculo. El P. Félix de la Puebla fue elegido presidente (esta vez era guardián) de Toledo el 28 de agosto. No quisieron asistir ni Fr. Blas de Villarrubia, ni Fr. Baltasar de Consuegra, seguramente no sólo por motivos personales sino también políticos, ya que el guardián antiguo, Fr. Francisco de Cañaveral, quería ser reelegido. Y esto, según una carta de Fr. Baltasar al cardenal (1 agosto de 1821) era anticonstitucional porque "segun los decretos del gobierno ninguno puede ser prelado, que no sea aderido al sistema del día". Esta interpretación de los decretos es interesante, y cierta en muchos casos, por lo menos en parte 137 . Seguramente en muchos conventos fueron elegidos, si no partidarios declarados del sistema constitucional, al menos personas moderadas capaces de entenderse con las autoridades. Parece claro que en Toledo había dos tendencias: una contraria al sistema constitucional y otra más proclive a él. Un aspecto que parece en contradicción con la ley, que con aires democráticos suprimía la jurisdicción de los generales y provinciales, es el mantenimiento de las exenciones que gozaban los exprovinciales, lectores, predicadores del rey, etc. 138 . De la Provincia de Andalucía nos han quedado pocos testimonios, incluso en los libros de crónicas. Sólo sabemos lo que nos dice la de Cádiz: el guardián, Fr. Mariano de la Paz de Ronda, renunció a la guardianía por ser "una carga superior á sus fuerzas", y lo hizo con conocimiento del obispo, lo 137 Acta de la elección del presidente de Toledo, 28 agosto 1821, firmada por el presidente del capítulo Fr. Francisco de Cañaveral; Carta de Fr. Baltasar de Consuegra al cardenal, I agosto 1821. En esta carta se decía también que las Constituciones capuchinas prohibían la reelección, objeción que no hemos encontrado en otros sitios, y que mezcla una normativa civil que nada tenía que ver con los religiosos con su propia legislación aprobada por la Iglesia. El 26 de julio también escribía al cardenal Fr. Modesto de Buenache, diciendo que no se habían leído en el refectorio los decretos del gobierno ni la despedida del provincial. Y el 29 de julio Fr. Félix de Sta. María exponía al cardenal que no había número suficiente de frailes para realizar la elección, y que 5 religiosos eran hechura del guardián, ADT, Legajo Capuchinos. 138 Así el P. Lino de Cantalapiedra el 2 de junio de 1822 pedía al cardenal poder gozar de las exenciones como ex-secretario general. El 18 de junio se le concedieron. Y lo mismo se le respondió al P. Francisco de Mendavia, guardián de S. Antonio, el 27 de julio sobre otros casos, !bid.

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