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622 BERNARDINO DE ARMELLADA para profundizar en la doctrina de Buenaventura y que Martignetti se propone emplear en este su discurso sobre el Ligum vitae. Describiendo el concepto como "coincidencia de complementariedad mutuamente afirmativa", examina las distintas clases de Coincidentia oppositorutJJ (150ss): 1ª Dios como Trinidad. 2ª Dios frente a la creación (ejemplarismo). 3ª El Verbo encarnado (hombre/Dios). 4ª El bien y el mal. 5ª Creación y Dios: en el retorno de la creación a Dios (esta 5ª oposición sería idéntica a la 2ª). La coincidencia de los opuestos se encontrará luego por doquier, comen– zando por la Trinidad, que sería la más perfecta coincidencia de opuestos dando origen a todas las coincidencias de opuestos en la creación (151ss). Así la oposi– ción entre Dios increado y el mundo creado encuentra la coincidencia en Cristo, Dios y criatura. Expresión bonaventuriana de esta coincidencia sería el ejemplarismo (oposición entre el modelo y la imagen creada) (154ss). Cristo ejemplar es el medio entre los dos extremos, participando de las propiedades de ambos (156ss). Así se concluyen los tres primeros capítulos de este libro con la convicción de que la "coincidencia de los opuestos es un concepto que ayuda al teólogo para entender del mejor modo posible la Trinidad, la encarnación del Verbo y la lucha entre el bien y el mal" (163). Cristo es la "coincidencia de opuestos" que ofrece la salvación a la humanidad siendo puente sobre el abismo que separa al mundo de Dios, un abismo abierto por el pecado y la desobediencia (164). Lo que constituye el cuerpo de este trabajo (capítulo 4º, p. 167-307:), es decir, ''Los frutos" del 'Lignum vitae'y las "raíces" del iter místico, es la lectura de los 12 capítulos del opúsculo a la luz y bajo el impulso de los instrumentos pro– puestos en las anteriores reflexiones: Un recorrido hacia la meta, sirviéndose del método del De triplici vía en una actitud de oración, viviendo las escenas de la vida de Cristo, esforzándose por compenetradas fielmente en sus detalles más significativos y experimentar cómo el alma, unida a Cristo, llega con Él a la paz, es iluminada por la verdad, para consumarse en la perfección del amor con– templativo. Las 48 ramas del árbol (cuatro de cada uno de los 12 frutos) son analizadas para llegar a 12 conclusiones en las que aparecen las raíces teológicas según las consideraciones precedentes, siendo la última de todas "la bondad que emana de Dios y que, a través del Verbo nos invita a retornar a la unidad con Él" (305). Digamos que el desarrollo del discurso es ejemplar. El análisis conceptual no descuida el avivar las disposiciones afectivas, de modo que el lector, lo mis– mo que el autor, no se quede a distancia de la narración, sino que se sienta invo– lucrado en el mismo evento.

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