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LOS ESCRITORES DE CASTILLA Y S. BUENAVENTURA 401 la luz d.ivina aspiran a la perfección, los medios verdaderos que han de escoger y los engañosos que han de dejar para llegar fácilmente a con– seguirla, Madrid 1701. Este sería el primer tomo de una obra que cons– taría de tres; en él se trata admirablemente de la oración o meditación y de la manera de practicarla con fruto. Las fuentes o citas de otros autores son pocas: se vale más que todo de los escritos de S. Juan de la Cruz y de Sta. Teresa de Jesús; a S. Buenaventura le menciona cuatro veces, aunque resaltando su doctrina y autoridad. Por ultimo, el P. Antonio de La Puebla de Almenara (Cuenca) (t 1710) fue otro escritor que igualmente desempeñó cargos relevantes 27 • Su obra se titula: Pan floreado y partido en prosa y verso para los pár– vulos en el conocimiento de la doctrina cristiana y perfección evangé– lica, Valladolid 1693. La primera parte viene a ser una explicación del catecismo y del modo de recibir los sacramentos de confesión y comu– nión; en la segunda se exponen los medios de perfección, insistiendo de modo particular en la oración y en la devoción a la Sma. Virgen. Las citas de otros escritores son muy pocas; respecto a S. Buenaven– tura, solamente dos veces copia algunas de sus palabras. 6. Otros varios escritores del siglo XVII Hay otros muchos religiosos de Castilla que dejaron a la posteri– dad sus producciones literarias. Citamos, entre otros, los nombres de los PP. Leandro de Murcia, José de Carabantes, Basilio de Zamora, José de Madrid, Bernardino de Madrid, José de Sevilla, Mateo de Anguiano. Sus obras tienen interés bajo diversos aspectos : dogmático, moral, jurí– dico, predicable, histórico, etc. Incluso varias de ellas, como los quince opúsculos publicados por el P. Carabantes, fueron divulgados con mu– cha profusión para instrucción de los fieles sobre la confesión, comu– nión, rezo del santo rosario, etc.; pero ninguno de ellos forma un cuer– po de doctrina ascético-mística. Por esto no nos detenemos en su exa– men, como tampoco lo hacemos respecto de los demás autores enun– ciados y otros varios más, entre ellos el P. Martín de Torrecilla. 7. Escritores de los siglos XVIII y XIX Por la razón indicada arriba de que no se nos tache de remisos o de haber omitido voluntariamente los nombres de escritores notables de la provincia de Castilla, que v1v1eron en los siglos XVIII y XIX y que se distinguieron igualmente por sus múltiples y valiosos escritos, 27 Necrologio, 89; La provincia I, 265, 327. 26

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