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LA LIBERTAD RELIGIOSA DEL INDIO ... 427 - quitárselo ha y pondralo con los veynte que diximos que an de estar siempre en la doctrina, y compelerá a los padres que lo sustenten de lo necesario'. * El hijo de fiel si acepta que sea bautizado: 'Y si fuere hijo de padres, uno fiel y otro infiel, y quisiere el fiel baptizar a su hijo y el infiel no, bap– tizarlo han en favor del fiel, teniendo el sobredicho cuydado que queda advertido'. * El hijo, finalmente, de fiel e infiel que no ha sido bautizado debe ser bautizado: 'Y si acaso el hijo de fiel e infiel no se hubiera baptizado dentro del término que los fieles baptizan a sus hijos, compelerá al padre fiel que baptize a su hijo, porque tiene obligación a baptizarlo el padre fiel, y sel sacerdote a hazerlo baptizar. Pero si acaso se passare tiempo por algún caso y viniere el muchacho a edad de discreción, que será de edad de diez años y no se quisiere baptizar, no lo compelerá porque no reciba el baptismo invito' (91). 3) La prohibición de los ritos precristianos Tal como sucediera en el sínodo de Juan de los Barrios, el Catecismo de Zapata establece diversas prohibiciones sobre las prácticas religiosas precristianas de los indígenas. Así, v.g., si en el sínodo de Juan de los Ba– rrios se mandaba la destrucción de los santuarios precristianos donde ya estaba extendida la fe cristiana, el Catecismo de Zapata establece la misma normativa 'por quanto los sanctuarios son tropiei;:o y estorbo que los infie– les no se conviertan, y assi mismo para que los nuevamente convertidos buelban a idolatrar... ', no permitiendo que sobre ellos se construya una iglesia cristiana' por la mucha experiencia que se tiene de la malicia des– tos indios, que debaxo de especie de piedad van a1 mismo lugar a idolatrar, pareció ser más conveniente raer de la tierra totalmente la memoria de los sanctuarios' (92). · Norma igualmente semejante a la de Juan de los Barrios es la que esta– blece la persecución de la práctica de los 'xeques, mohanes y hechiceros' 'por quanto el otro impedimento de la predicación evangélica y conversión destos naturales a nuestra sancta fe catholica, son los xeques y mohanes y hechiceros, los quales en acabando el sacerdote de predicar, ellos les dizen y predican lo contrario, apartándolos de nuestra sancta fe, y les dizen que lo que los sacerdotes les enseñan son engaños' (93). A diferencia del síno- (9I)Catecismo, c.31. (92)Ibid., c.14. (93)Ibid. c.15.