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ORIGEN Autor de la imagen Primera mitad del siglo XVII. En un taller sevillano -¿de Luis de la Peña? ¿de Francisco de Ocampo ...?- se dan los últimos toques a una escultura en talla de Jesús Nazareno. Representa la escena evangélica del «Ecce Horno». La imagen, de un metro y setenta y tres centímetros, descansa de pie sobre una sencilla peana. Su cuerpo está todo él mode– lado con pormenores anatómicos; en especial se han cuidado aquellas partes que van a que– dar expuestas a la veneración: cabeza, manos y pies. Los cabellos al natural; rostro, sereno y dolorido; la boca, entreabierta; la barbilla, corta. Los brazos están articulados por los hombros para facilitar el ser vestido; un leve sudario, de líneas simples, cubre las caderas... La unción religiosa, la majestad y serenidad son características esenciales de esta bella escultura. «Indudablemente, afirma José Hernández Díaz, la imagen de Jesús es obra sevillana, que podría fecharse en el segundo o tercer decenio del siglo XVII. Algunos de sus rasgos expresivos recuerdan los empleados por Francisco de Ocampo en varias de sus obras identificadas; pero sus fórmulas artísticas son análogas a las que el imaginero Luis de la Peña utilizó en sus imágenes de Jesús Dolori– do, que se veneran en diversos templos de Morón de la Frontera (Sevilla), y que están fechadas en ese mismo tiempo» 1 . ¿A quién pertenecía la imagen? Aunque hoy en día todavía nos movemos en el campo de las hipótesis, sin embargo, por las razones que indicamos a continuación, creemos fir– memente que a los Capuchinos de Anda– lucía. La imagen en la Plaza fuerte de Mehdía o Mámora En 1645 Fr. Francisco Guerra, obispo de Cádiz, nombraba a los Padres Capuchinos capellanes de Mehdía o Mámora 2 • Se trataba de una Plaza fuerte española, conquistada a los moros en el reino de Fez (Marruecos) en 1614 3 • Mámora significa «bosque»; es un extenso bosque existente en las proximidades de la ciudad amurallada de Mehdía. Aún hoy en día recibe ambos nombres. Los españoles la llamaron también San Miguel de Ultramar. Está situada en las costas atlánticas, en la desembocadura del río Sebú, a ocho kilóme– tros de la ciudad de Kenitra. A esta Plaza marchan en la primera expe– dición tres religiosos capuchinos: el P. Sebas– tián de Santa Fe, como Vicario y capellán mayor, el P. Juan de Vergara y el Hno. Alon– so de Antequera 4 • Cuando llegan a Mehdía, el 17 de septiembre de 1645, aún no estaba allí la imagen de Jesús Nazareno. En efecto, el día 13 del citado mes tiene lugar en la for– taleza un hecho calamitoso y de gran preocu– pación para la citada población. Por la imprudencia de un soldado, «se incendiaron dos barriles de pólvora y explotaron de una manera tan violenta que voló, no sólo la sala donde estaban, sino también se voló nuestra iglesia, sin quedar en ella sino sólo los cimien- ◄ Jesús Nazareno. Detalle. Cabeza al natural, llena de unción y majestad.